El cohete de China para llegar a la Luna será el apoyo estratégico clave en el avance del país hacia una potencia espacial.
Para 2027, China tiene el objetivo de llegar a la Luna. Para ello está alistando un cohete tripulado para llevar taikonautas (astronautas chinos) al satélite natural de la Tierra.
Se trata de un lanzador de tres etapas y media que mide 90 metros de altura, 5 metros de diámetro y pesa unas 2.187 toneladas en el lanzamiento. Esto es lo que sabemos sobre el cohete de China para llegar a la Luna.
Según la CASC (China Aerospace Science and Technology Corp), que ha presentado el lanzador en el XIV China Airshow, que se celebra en Guangdong, en estos momentos, el dispositivo se encuentra en una etapa de desarrollo prototipo.
“Será el apoyo estratégico clave en el avance del país hacia una potencia espacial. Se espera que alcance las condiciones de vuelo inaugural para 2027”, dijo el CASC en un comunicado, citado por Global Times.
Este cohete se caracteriza por tener un empuje de lanzamiento de 2.678 kilonewtons y dos propulsores de 5 metros de diámetro. Será capaz de enviar una carga útil de 27 toneladas directamente a la Órbita de Transferencia Lunar (LTO), o una carga útil de 70 toneladas a la órbita cercana a la Tierra, según el CASC.
Para asegurar que la tripulación viaje sin riesgos, el prototipo podrá ajustar los planes de vuelo desde el despegue hasta la etapa de separación de la nave espacial de carga útil del cohete.
China en la carrera espacial
En 2003, Yang Linwei se convirtió en el primer taikonauta (Taikong significa espacio en mandarín) con el Shenzhou5. Su misión fue simplemente demostrar que China ya estaba en capacidad de realizar exploraciones tripuladas.
Más tarde, en septiembre del 2011, China lanzó su primera base modular, el Tiangong1 (Palacio Celestial en mandarín) y luego en noviembre, el Shenzhou 8, se acopló de forma programada con la base.
China es actualmente uno de los países que mayor empuje está teniendo en la carrera espacial. Sus proyectos muestran una gran ambición al nivel de las naciones pioneras en la exploración espacial como los Estados Unidos o Rusia.
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Por otro lado, el país asiático ha estado en el ojo del huracán debido a los cohetes que han caído sin control en la Tierra. El último de ellos apenas regresó a nuestro planeta el 4 de noviembre pasado para caer en el mar. Esto ha causado controversia, pues países como los EE.UU. acusan a China de no tener un control en el manejo de sus dispositivos.
Aunque a decir verdad, la caída de objetos fabricados por el hombre a la Tierra provenientes del espacio es más vieja de lo que pudiéramos creer.
La controversia no queda ahí. Los mismos EE.UU. acusaron meses atrás a China de buscar apoderarse de la Luna para construir una base operativa con el apoyo de Rusia.
“Debemos estar muy preocupados de que China vaya a aterrizar en la Luna para decir: ahora es nuestra y tú quédate fuera“, contó el funcionario de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA), Bill Nelson.
Entre sus múltiples declaraciones, Nelson también criticó el programa de limpieza espacial emprendido por la Administración Espacial Nacional China pues, afirma, este se ha beneficiado del apoyo de Rusia y el robo de información para amenazar a satélites extranjeros.
La pelea internacional por conquistar el espacio no es algo nuevo, pero con China como nuevo contendiente en el escenario la situación parece ser más tensa que nunca.
Fuente: Muy Interesante
