El fiscal especial Jack Smith solicitó este lunes a un juez desestimar los dos casos federales en contra de Donald Trump: uno por su presunta interferencia en los resultados de las elecciones de 2020 y otro por supuestamente haber retenido documentos confidenciales de forma ilegal.
La movida del fiscal especial se da tras el reciente triunfo de Trump en las presidenciales del pasado 5 de noviembre. “El Departamento de Justicia sostiene desde hace tiempo que la Constitución de Estados Unidos prohíbe la acusación federal y el subsiguiente enjuiciamiento penal del presidente en ejercicio”, escribió Smith en una presentación de seis páginas para desestimar el caso de interferencia electoral.
“La posición del Departamento (de Justicia) es que la Constitución requiere que este caso sea desestimado antes de que el acusado sea investido”, agregó.
Con esta medida, el fiscal especial pidió retirar los cuatro cargos de delito grave contra Trump en relación con su presunto esfuerzo por anular los resultados de los comicios de 2020, en el período previo al ataque del 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos.
Minutos después, bajo el mismo argumento, solicitó que se desestime el caso en el que se acusa al republicano de retener ilegalmente documentos clasificados en su residencia de Mar-a-Lago. En su escrito, Smith dijo que retiraba su apelación al un fallo de un juez de distrito, designado por Trump, que había desestimado este caso a principios de este año.
Una decisión que se esperaba tras el triunfo de Trump en las elecciones
Smith fue enfático en que desistía de los casos debido a que un presidente no puede ser procesado, pero que ello no implica que el republicano sea inocente de haber cometido dichos delitos.