La ambición de los estudiantes puede generar grandes historias. Algunos ejemplos son el desarrollo de manuales para bombas atómicas o la construcción de reactores de fusión nuclear en un dormitorio con ayuda de inteligencia artificial.
Sin embargo, esta nota trata sobre Lan Bowen, un adolescente chino de 17 años que construyó un smartphone plegable. Para lograrlo, utilizó materiales reciclados de cinco teléfonos viejos de su familia, de los cuales recuperó sus componentes. Su objetivo era crear un dispositivo único que combinara la funcionalidad de un teléfono moderno con la característica de ser plegable.
Según reporta JeuxVideo, este smartphone se fabricó con una impresora 3D de 250 euros y materiales reciclados. El proyecto requirió cinco paneles distintos y la realización de múltiples pruebas. Uno de sus mayores retos fue evitar fallos en la pantalla durante el pliegue, por lo que tuvo que rehacer el diseño varias veces hasta encontrar el resultado óptimo.
A diferencia de las opciones tradicionales del mercado, la variante de Bowen se diseñó en la habitación de su instituto a un costo mínimo. El joven partió de modelos 3D para la carcasa del dispositivo, que incluyen una bisagra con una característica particular: se pliega hacia afuera y no hacia adentro.
Un diseño que «desafía» al mercado
Este diseño lo diferencia del concepto que ya existe en el mercado, en el cual la pantalla se ‘guarda‘ dentro de la carcasa. Por el contrario, en su versión, la pantalla es la que cubre el smartphone. Esto demuestra que Bowen no solo copió lo existente, sino que desarrolló su propia variante.
A pesar de los elogios que ha recibido de los internautas, Bowen no piensa detenerse. Acepta que su equipo se encuentra en una etapa rudimentaria y con deficiencias, pero aun así, es compatible con todas las funciones de un smartphone convencional.
El dispositivo también tiene detalles
por mejorar. Por ejemplo, es más grueso que otros del mercado, con 1.6 cm cuando está plegado. Sin embargo, el proyecto es toda una hazaña y ha sido elogiado por fabricantes como Vivo, que calificó su solución como ‘brillante’.
Ahora, solo queda esperar cuál será el siguiente paso de Bowen. Aún tiene mucho trabajo por delante, pero de momento, todo apunta a que va por buen camino en su desarrollo.