Europa enfrenta actualmente una emergencia sanitaria por la tercera ola de COVID-19, la cual ha provocado una crisis económica que ha llevado a miles de personas a quedarse sin empleo.
En las principales calles de Europa se pueden observar largas filas de personas que acuden a fundaciones, ong, iglesias, comedores comunitarios o en bancos de alimentos en busca de un plato de comida o cajas con alimentos.
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De acuerdo a medios locales, las “colas de hambre” son cada vez más visibles en España o Inglaterra, en donde los casos de COVID-19 parecen no dar tregua en medio de la crisis económica por la que atraviesan los países.
Desde el comienzo de la pandemia del COVID-19, el gobierno español desembolsó 47.600 millones de dólares para financiar los planes de desempleo parcial, una de las medidas principales para sostener a los hogares afectados y evitar despidos masivos.
En Madrid, la capital de España, se pueden observar impresionantes “colas de hambre”, debido a la fuerte crisis y desempleo que no se vivía desde el 2008.
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Tercera ola de COVID-19 en Europa
Este martes la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) advirtieron que la desnutrición aguda “se disparará en más de 20 países” debido a la crisis generada por la pandemia.
Como dimos a conocer previamente en La Verdad Noticias, Europa enfrenta su tercera ola de COVID-19 en medio de hospitales a punto del colapso por nuevas variantes, confinamientos totales y escasez de vacunas. Desde el 19 de marzo, Francia se encuentra en su tercer confinamiento, el cual según medios locales durará al menos un mes, esto como medida desesperada para aplanar el número de contagios.
La variante de COVID-19 hallada en Reino Unido se convirtió en la predominante en los contagios en países de Europa. Esta también es responsable de la mayoría de los casos nuevos en Francia e Italia, según funcionarios de salud. Mientras que en España, la B.1.1.7 es ahora la cepa dominante en nueve de las 19 regiones del país.
FUENTE: La Verdad