n una cumbre de emergencia en el Cairo, líderes de los países árabes adoptaron las propuestas del presidente egipcio Abdulfatah el-Sisi para la eventual reconstrucción de la franja de Gaza.
Planeada para contrarrestar las propuestas de Donald Trump de convertir la región en un desarrollo estadounidense y desplazar a la población palestina, la proposición del mandatario egipcio busca no solo crear consenso entre los liderazgos de la región sino también generar mayor involucramiento palestino en el futuro de su territorio.
Visualizada en tres fases que tomarían de tres a cinco años en completarse, la propuesta egipcia se divide en la reconstrucción temprana de la franja, que incluye el retiro de minas del territorio y el acceso a vivienda temporal, seguida de una etapa de reconstrucción de infraestructura esencial, en la que destacan un puerto comercial y un aeropuerto . Por último, se llevaría a cabo la construcción de nuevos hogares y el establecimiento de una vía política para una solución de dos Estados.
Si bien el costo de la propuesta egipcia alcanza se eleva poco por encima de los 50 mil millones de dólares, durante la cumbre en el Cairo no se discutió cómo se juntarían los fondos. Aunque se entiende que los países petroleros de la Península Árabe, como Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, aporten 20 mil millones de dólares para las primeras etapas de reconstrucción, no fueron ofrecidos detalles acerca del resto de los recursos.
Más allá de la procedencia de los recursos, la cumbre no abordó plenamente la gobernanza de la franja de Gaza después del conflicto. Si bien está claro que el financiamiento para la reconstrucción depende de que el grupo terrorista Hamás deje la administración de la franja, la agrupación ha declarado rechazar cualquier imposición extranjera y exigir involucramiento palestino en el futuro de su territorio.
Como respuesta, la propuesta de el-Sisi incluye la creación de un comité de administración independiente que incluya a tecnócratas y profesionales palestinos que tomen en sus manos la gobernanza de Gaza. De acuerdo con el mandatario, su gobierno ya ha trabajado en la creación de este cuerpo y este sería responsable de la administración no solo del territorio sino también de la ayuda para la reconstrucción en sus primeras etapas; el Cairo prevé que este comité prepare la llegada de la Autoridad Nacional Palestina como gobierno permanente.
Rivales de Hamás, la Autoridad Nacional Palestina no ha tenido una presencia firme en Gaza desde que fue derrotada electoralmente en 2006; sin embargo, el grupo liderado por Mahmud Abás goza de mayor legitimidad internacional que Hamás.
Para Arabia Saudita y los Emiratos Árabes, Hamás es un grupo extremista que obstruye la cooperación internacional, por lo que su desarme y aislamiento de cualquier rol administrativo es necesario para avanzar con los planes de reconstrucción; para Israel, la destrucción del grupo terrorista es una de sus principales objetivos militares.
FUENTE: PROECESO
