El actor canadiense Spencer Lofranco, recordado por sus papeles en Unbroken y Gotti, falleció a los 33 años el martes 18 de noviembre de 2025. La noticia fue confirmada dos días después por su hermano, Santino Lofranco, a través de una publicación de Instagram.
El post incluía imágenes nostálgicas de la infancia y juventud de ambos hermanos. “Viviste una vida con la que solo algunos pueden soñar. Cambiaste la vida de las personas, y ahora estás con Dios. Siempre te amaré y te extrañaré, Bear. RIP”, escribió Santino.
Por el momento no se ha precisado la causa oficial de su muerte. Según TMZ, las autoridades en Columbia Británica están investigando las circunstancias del deceso.
Nacido el 18 de octubre de 1992 en Toronto, Lofranco creció en una familia artística y académica: su madre era cantante de ópera y su padre abogado.
Estudió en la academia militar Robert Land Academy durante la secundaria antes de decantarse por la actuación, una decisión que tomó a los 17 años, según él mismo contó a Interview Magazine en 2014.
“Yo siempre era el chico gracioso, siempre tratando de hacer reír a la gente y siempre el centro de atención. Supongo que fui actor toda mi vida”, dijo en aquella entrevista.
Agregó también que buscó formarse con mayor seriedad luego de meterse en problemas por su comportamiento impulsivo.
“Finalmente me di cuenta de lo que estaba haciendo y solo me estaba metiendo en problemas. Fui a clases de actuación de verano. Luego hice un año en la New York Film Academy y ahí fue cuando obtuve Jamesy Boy”.
De hecho, antes de alcanzar notoriedad en la pantalla grande, Lofranco enfrentó un problema legal serio. En 2013 estuvo involucrado en un caso de atropello y fuga. Mientras manejaba su camioneta, atropelló a un ciclista que sufrió fracturas múltiples, incluido un hueso de la cadera, reportó The Independent UK.
El actor inicialmente bajó del vehículo a disculparse, pero luego abandonó la escena sin brindar más ayuda. Fue condenado por delito menor a 50 días de servicio comunitario, dos años de libertad condicional y al pago de 161.000 dólares en restitución.
Su carrera en cine inició en 2013 con At Middleton, donde compartió escena con Andy García y las hermanas Vera y Taissa Farmiga. Ese mismo año consiguió su primer papel protagónico en Jamesy Boy, drama criminal dirigido por Trevor White, en el que interpretó a un adolescente problemático. En el proyecto trabajó con actores como James Woods, Ving Rhames y Mary-Louise Parker.
En 2014 fue convocado para actuar en Unbroken, el drama bélico dirigido por Angelina Jolie. Allí interpretó a Harry Brooks, uno de los miembros de la tripulación del bombardero en el que viajaba el atleta y héroe de guerra Louis Zamperini.
Para Lofranco, trabajar con la estrella de Hollywood fue un sueño cumplido. En su entrevista con Interview Magazine declaró emocionado: “Creciendo, Angelina Jolie era mi chica soñada. Ahora voy a filmar una película con ella. Es una locura”.
Su último papel en cine llegó en 2018 con Gotti, donde interpretó a John Gotti Jr., hijo del mítico jefe mafioso neoyorquino que encarnó John Travolta. Fue la película más importante que hizo y también la que marcó el final de su periodo activo como actor.
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Tras Gotti, Lofranco se alejó del cine. Según NME, a partir de 2021 vivió en Surrey, Columbia Británica, donde se dedicó al arte callejero. En redes sociales compartía imágenes de su vida cotidiana, proyectos personales y reflexiones. Su última publicación, hecha el 11 de noviembre, mostraba un selfie en blanco y negro y decía: “Lo mejor está por venir”.
