La organización New 7 Wonders advirtió que Machu Picchu podría perder su título de Nueva Maravilla del Mundo si no se corrigen problemas como la masificación turística sin gestión sostenible, el alza de precios, riesgos al patrimonio y prácticas irregulares en la venta de entradas.
En un comunicado firmado en Zúrich, la entidad recordó que ha enviado propuestas a las autoridades peruanas para implementar un plan estratégico que garantice la conservación y gestión adecuada del sitio. Recalcó que la credibilidad de Machu Picchu como maravilla mundial depende de esas acciones.
LEER: ESPAÑA FORMALIZA EMBARGO TOTAL CONTRA ISRAEL EN MEDIO DE GUERRA EN GAZA
«La permanencia, justificable y creíble, de Machu Picchu como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo bajo nuestra jurisdicción depende de ello, lo cual sigue siendo nuestro objetivo primordial», remarcó el comunicado, que fue suscrito el sábado pasado en Zurich por el director de la organización, Jean-Paul de la Fuente.
La organización también destacó que desde su elección en 2007, la ciudadela ha sido símbolo de orgullo para el Perú, pero alertó sobre conflictos sociales, falta de coordinación institucional y quejas de visitantes que podrían dañar su imagen internacional, e incluso «comprometer la credibilidad de Machu Picchu» como una de las «nuevas 7 maravillas del mundo».
Por su parte, el ministro de Cultura, Fabricio Valencia, anunció que este 2025 se espera la llegada de más de 1,5 millones de turistas, cifra superior al récord alcanzado en 2019. Explicó que el crecimiento se debe a mejoras en la venta de entradas y ampliación de horarios, con un aforo diario de hasta 5.600 visitantes en temporada alta, de junio a noviembre.
Sin embargo, la gestión enfrenta tensiones: un sabotaje en un tren retrasó el traslado de nuevos autobuses para acceder a la ciudadela, lo que provocó protestas de comunidades locales y la suspensión temporal de servicios ferroviarios, afectando a los turistas que intentan llegar a Machu Picchu.

Levantan bloqueos tras acuerdo sobre transporte
Los pobladores que bloqueaban el acceso a Machu Picchu levantaron su protesta tras un acuerdo que permitirá a dos empresas —la antigua concesionaria Consettur y la nueva compañía comunitaria Inversiones Sumaq San Antonio de Torontoy— operar de manera conjunta el transporte de turistas hacia la ciudadela durante cuatro meses, hasta que se convoque una nueva licitación.
La Defensoría del Pueblo confirmó que la medida devuelve la normalidad al principal destino turístico de Perú, Patrimonio de la Humanidad desde 1983.
Las protestas, iniciadas el 14 de septiembre por comunidades campesinas que rechazaban la continuidad de la concesión privada, afectaron las visitas y obligaron a evacuar a unos 2.300 turistas, además de dejar 14 policías heridos en enfrentamientos.