Cancún, Quintana Roo a 25 de octubre del 2021: Decenas de miles de personas en el norte de China se hallan confinadas en sus viviendas, mientras las autoridades intentan detener un rebrote de COVID-19 que empieza a crecer, 100 días antes del inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín.
También restringieron el acceso a los lugares turísticos y aconsejaron a los residentes que limitaran sus movimientos a menos que fuera necesario, pese a que el transporte público funciona con normalidad.
China identificó 39 nuevos casos de COVID-19 el lunes y más de 100 durante la semana pasada. La mayoría de estos contagios estaban relacionadas con los movimientos de un grupo de turistas.
Pese a que la cifra de nuevos casos es baja con respecto a los países del resto del mundo, el gobierno de China, que impulsa una política de “tolerancia cero” hacia el virus, reaccionó rápidamente, imponiendo restricciones y organizando campañas de detección masiva en las regiones afectadas.
En Pekín, donde está previsto que comiencen los Juegos Olímpicos de Invierno el 4 de febrero, se aplazó de manera indefinida un maratón previsto para el 31 de octubre en el que iban a participar unos 30 mil corredores.
Se aplazó “para evitar el riesgo de transmisión epidémica”, indicaron los organizadores.
Confinamientos en China
Las autoridades ordenaron a unos 23 mil residentes de un complejo de viviendas en el distrito de Changping, China, que permanezcan en el interior tras detectar nueve casos en los últimos días, informó el medio local Beijing News.
Las fotos mostraban a funcionarios con uniformes especiales para sustancias peligrosas que vigilaban en las entradas de cada bloque de apartamentos, al mismo tiempo que el perímetro estaba bloqueado por barricadas de metal.
En una rueda de prensa, el viceministro de Publicidad de China, Xu Hejian, señaló que cualquier persona proveniente de una zona donde se hayan identificado casos de COVID-19 en las últimas dos semanas debe presentar un test negativo.
También están restringidos los parques, teatros, cines, museos y otros sitios que estén cubiertos al menos el 75% de su capacidad, además de salas de mahjong. Asimismo, pidieron a los residentes que eviten viajes “innecesarios” fuera de la ciudad y reuniones a gran escala.
Los nuevos casos de COVID-19 se han detectado en 11 provincias, en su mayoría ubicadas en el norte del país. En Ejin, una ciudad en Mongolia Interior, en el norte de de China, alrededor de 35 mil personas fueron confinadas a partir del lunes por un periodo de dos semanas.
Las autoridades sanitarias advirtieron que nuevos rebrotes en China podrían surgir a medida que se intensifican las pruebas en los próximos días para combatirlos, pues están relacionados con un grupo de turistas nacionales que viajaron por el país.
En algunas ciudades del norte, incluida Lanzhou, la capital de la provincia de Gansu, se suspendieron los servicios de autobús y taxi y se cerraron los lugares turísticos.
El domingo, las autoridades de China ya habían anunciado la suspensión de los viajes turísticos organizados a cinco zonas donde se han reportado rebrotes de COVID-19, incluida Pekín.
En la ciudad de Wuhan, China, donde se detectó por primera vez el COVID-19 a finales de 2019, los organizadores de un maratón cancelaron el domingo la competición en la que se esperaba la participación de más de 26 mil competidores.