SpaceX intentará que tanto el propulsor Super Heavy como la nave Starship regresen intactos a la Tierra tras cumplir su misión.
Redacción Macronews
Starbase, Texas, 13 de octubre del 2025.– SpaceX se alista para realizar uno de los vuelos más importantes de su historia: el “Vuelo 11” de Starship, el cohete más grande y potente jamás construido. El objetivo es lograr que ambas etapas regresen completas tras el lanzamiento, un paso clave hacia los futuros viajes a la Luna y Marte.
El despegue está previsto para la noche de este lunes 13 de octubre, alrededor de las 19:15 hora local (23:15 GMT), desde la base de Starbase, Texas. En caso de éxito, la misión representaría un salto histórico para la reutilización total de cohetes, reduciendo costos y ampliando las posibilidades de exploración espacial.
Un vuelo de alto riesgo
El “Vuelo 11” pondrá a prueba maniobras inéditas: reingreso atmosférico con secciones del escudo térmico intencionalmente retiradas, liberación de cargas simuladas y control térmico extremo. SpaceX busca recopilar datos sobre el comportamiento del vehículo en condiciones límite.
En el vuelo anterior, realizado el 26 de agosto, la etapa Super Heavy logró un amerizaje controlado en el Golfo de México, mientras que la nave Starship descendió sobre el océano Índico. Esta nueva misión añadirá desafíos adicionales y maniobras más complejas.
Tecnología y precisión
Starship consta de dos etapas: el propulsor Super Heavy, con 33 motores Raptor, y la nave Starship, equipada con otros seis. Cada una fue diseñada para ser completamente reutilizable, un elemento central de la visión de Elon Musk para abaratar los vuelos espaciales.
Durante el descenso del propulsor, se prevé una secuencia de tres fases:
Trece motores frenarán la caída inicial.
Cinco estabilizarán la trayectoria.
Tres motores centrales realizarán el aterrizaje final sobre el Golfo de México.
La etapa superior liberará ocho “cargas ficticias” que simulan satélites Starlink antes de amerizar en el océano Índico, probando maniobras que serán esenciales en misiones futuras.
Camino hacia la Luna y Marte
El éxito del Vuelo 11 tendría repercusiones directas en el programa Artemis de la NASA, ya que Starship será la nave encargada de transportar astronautas a la superficie lunar en los próximos años.
Más allá de la tecnología, el lanzamiento genera expectación global. Miles de personas se congregan en Starbase para presenciar el evento, mientras millones seguirán la transmisión en vivo.
Cada vuelo de prueba representa un nuevo paso hacia la colonización de otros mundos. Si SpaceX logra recuperar ambas etapas, el Vuelo 11 podría consolidarse como el inicio de una nueva era en la exploración espacial.