Tesla ha hecho su presentación de resultados de ventas y las noticias no han sido las que esperaban: las ventas de sus coches eléctricos han caído en picado durante el último trimestre, sobre todo en Europa.
Algunos inversores no han podido evitar asociar esta caída al activismo político del CEO de Tesla, y ven en esta caída la reacción de los mercados al apoyo de Elon Musk a los partidos de ultraderecha de Alemania y Reino Unido.
El batacazo de Alemania. Según datos de la Autoridad Federal de Transporte por Carretera de Alemania (KBA), durante el mes de enero de 2025, Tesla solo matriculó 1.277 coches eléctricos en el mayor mercado automovilístico de Europa. Eso supone una caída del 59,5% con respecto a las ventas del año anterior.
La caída en ventas de Tesla en Alemania contrasta con el número de matriculaciones de vehículos eléctricos de batería (BEV) en ese país, que ascendieron a 34.498 unidades matriculadas, incrementándose la cifra en un 53,5% con respecto al año anterior. Es decir, los alemanes han comprado más coches eléctricos, pero estos coches no eran de Tesla.
Se puede atribuir el descenso de ventas en la retirada de los incentivos para la compra de coches eléctricos, pero esta teoría quedaría descartada porque eso impactaría por igual a todos los fabricantes de coches eléctricos. Sin embargo, el fabricante chino BYD ha sido el gran beneficiado del tropiezo de Tesla, incrementando sus ventas en un 69,1% durante el mismo periodo.No es un caso aislado. Una caída tan pronunciada en un solo mercado puede atribuirse a determinados factores económicos. Sin embargo, cuando la situación se replica con caídas generalizadas en los principales mercados europeos, el diagnostico también cambia.
Según datos publicados por Electrek, las ventas de Tesla cayeron un 75,4% en España, un 63,4% en Francia, 46% en Suecia, 42,5% en Países Bajos, 40,9% en Dinamarca o el 40,2% en Noruega, un mercado en el que el 90% de los coches que se venden son eléctricos. En términos generales, el total de ventas de Tesla cayó un 47,7% en Europa y un 7,78% en Reino Unido.
Llama la atención que, en California, un estado donde Tesla habitualmente conseguía buenas cifras de ventas, también han caído un 36% las ventas del Model 3.
Todo apunta a un responsable: la política. Uno de los motivos que distintos responsables de la industria automovilística europea han argumentado como explicación para el descenso de ventas de la marca es el papel político de Elon Musk en el gobierno de EEUU y su apoyo explícito a formaciones de extrema derecha en Alemania y Reino Unido.
El medio francés France24 recogía las declaraciones de Ferdinand Dudenhoeffer, director del Centro de Investigación Automotriz en Alemania, asegurando que el comportamiento del CEO de Tesla estaba siendo «extremadamente perjudicial» para el fabricante en ese país. «Nadie quiere estar asociado con esto. Tesla y Musk están casi inextricablemente vinculados».
Tesla paga las facturas de Musk. El fabricante de coches eléctricos se ha convertido en el objetivo de protestas de distinto tipo en diferentes países en Europa. Tras el polémico saludo al público tras la investidura de Trump, unos activistas proyectaron la palabra «Heil» en la fachada principal de la gigafactoría de Tesla en Berlín.
El grupo Everyone Hates Elon ha estado marcando los Tesla de Londres con adhesivos en los que se lee: «Don’t buy a swasticar» (No compres un coche-esvástica) y divulgándolo en sus redes sociales.
Los inversores empiezan a preocuparse. Durante el último trimestre, el fabricante ha registrado un descenso en sus ingresos de operaciones con 1.600 millones de dólares, frente a los 2.100 millones de dólares declarados en el mismo trimestre de 2023. Antes esta caída, los inversores se mostraron preocupados por la faceta política de Elon Musk y su efecto negativo sobre la marca, así como el tiempo que le ocupa su papel al frente de DOGE. Al fin y al cabo, Tesla paga el salario de Musk, no el gobierno de EEUU.
CNBC recogió algunas de esas preguntas de los inversores: «¿Cuánto tiempo dedica Elon Musk a hacer crecer Tesla, resolver problemas de productos y generar valor para los accionistas en comparación con sus compromisos públicos con Trump, DOGE y actividades políticas?», preguntó uno de los inversores minoristas presentes.
Otros inversores preguntaron si Tesla había «perdido ventas debido a las actividades políticas de Elon» y se preguntaba cómo iba la compañía a «responder al infame saludo nazi de Musk y como se está abordando los impactos negativos de las opiniones y actividades públicas de Elon Musk». Ninguna de ellas recibió respuesta de la directiva.
FUENTE: XATAKA