El presidente López Obrador reiteró que el próximo año México dejará de comprar gasolina en el exterior por la refinería de Dos Bocas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró este miércoles que con la entrada de operaciones de la refinería Olmeca, en Paraíso, Tabasco, México no tendrá que comprar gasolinas en el extranjero y se comprometió a que en un lapso de 6 meses, esta nueva instalación será capaz de procesar 340 mil barriles de petróleo.
“Va llevar tiempo, pero la parte constructiva acaba este año y va entrar a operar el equipo especializado de refinación, pero no son dos años, nosotros vamos a cumplir que el año próximo dejamos de comprar gasolinas. Nos va dar como 150 millones de barriles diarios esta planta, 150 mil barriles diarios de gasolina, es parecido a lo que nos está dado la planta de Deer Park”, sostuvo el mandatario federal.
En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo federal explicó que la meta del gobierno es que con las ocho refinerías con las que cuenta México se pueda alcanzar una producción diaria de dos millones de barriles de petróleo.
Dijo que este plan permitirá que el país cuenta con 800 mil barriles diarios de gasolina y hasta 600 mil de diésel lo que garantizará la autosuficiencia energética.
“Sí nos va llevar tiempo, pero no los dos años, va estar produciendo a toda su capacidad el año próximo. El compromiso es ser autosuficientes en 2023 y es el compromiso que vamos a cumplir”, afirmó.
Apenas este sábado, el gobierno federal anunció la construcción de una planta de licuefacción de gas y una coquizadora en Oaxaca que requerirá una inversión de 120 mil millones de pesos.
La construir una planta de licuefacción de gas y una coquizadora en Oaxaca, con una inversión estimada de 120,000 millones de pesos.
El presidente de la República explicó que en lo que va de su sexenio se han invertido alrededor de 26 mil millones de pesos para la rehabilitación del sistema de refinación del país con el objetivo de reducir la dependencia de México de los combustibles extranjeros, que se ven presionados por los altos costos de las materias primas y el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
FUENTE: FORBES
