“Hubo un impacto muy fuerte que sentí que empezó a incendiar el helicóptero y fue cuando empezamos a caer”, narró en septiembre de 2024 el suboficial de la extinta Policía Federal, Iván Morales Corrales, único sobreviviente del atentado perpetrado en Villa Purificación, Jalisco, en 2015. Su relato lo compartió en la Corte del Distrito de Columbia, en Estados Unidos, durante el juicio contra Rubén Oseguera González, “El Menchito”, quien de acuerdo con las autoridades estadounidenses fue quien dio la orden de que la aeronave fuera derribada para evitar la aprehensión de su padre, Nemesio Oseguera Cervantes, el líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El suboficial Iván Morales Corrales fue uno de los elementos que integró la “Operación Jalisco”, desplegada el 1 de mayo de 2015. El objetivo era detener a “El Mencho”, aunque la meta de esta operación se mantuvo en secreto incluso cuando se llevaba a cabo. Para ello, el Gobierno de México dispuso de cuatro helicópteros, 16 miembros del Ejército, él y su compañera, ambos de la Policía Federal. Él viajaba en el Cougar, matrícula 1009, de la Fuerza Aérea Mexicana. La idea era hacer una detención quirúrgica, pero no fue así. Gatilleros del CJNG recibieron la orden del “Menchito” de evitar la captura de su padre, “El Señor de los Gallos”. El resultado fue una jornada que paralizó Jalisco y en la que todo mundo vio la capacidad de fuego de esta agrupación criminal.
“Lo único que me acuerdo es que los impactos […] cómo se escuchaban los sonidos, cómo pegaban en la lámina, cómo veías que pasaban más las balas de calibre 50 porque son las que atravesaban el casco del helicóptero”, declaró Morales Corrales a Univisión en noviembre de 2023. “Yo sí pensé que iba a fallecer ahí y por todo, el armamento, todo lo que está pasando afuera, o sea sí se escuchaba bastante fuerte”.
La aeronave se desplomó al ser alcanzada por cohetes lanzados por un RPG soviético. Se sabe que los sicarios también atacaron la aeronave con una Barret y una vez que el helicóptero chocó, fueron cazando a los sobrevivientes. Iván Morales ha relatado que oyendo lo que sucedía salió por la única vía que estaba en llamas, quemando el 70 por ciento de su cuerpo.
“Sólo me pude tomar de donde pude para resistir el impacto. Traté de salir del helicóptero pero todo estaba incendiado”, contó en la Corte de EU. “Me quemé, traté de apagarme luego luego, quitarme la ropa y el equipo.”
El suboficial sobrevivió para conocer a su hijo que estaba por nacer. “Todo el tiempo estuve pensando en eso. Cuando me encontraron me cuentan que yo les decía que yo me iba a casar, que iba a tener un hijo. Yo quiero conocer a mi hijo, y fue más que nada esa fuerza que tuve por salir”, contó a Univisión.
En diciembre de ese fatídico año, Iván Morales Corrales fue reconocido con la condecoración al Mérito Policial de Primera Clase que le entregó Enrique Peña Nieto. En el video se aprecia cómo es recibido en medio de un aplauso generalizado. Y en julio de 2018, le entregó una escritura pública por su “valor y entrega”.
“Yo quise que vieran mi rostro. No era por lástima o que me tuvieran lástima. No, al contrario, sé que había tenido un accidente, un atentado en contra de nosotros, o sea del personal, y solamente ver, demostrar que sí hay cicatrices que duelen, que te dejan, pero puedes seguir adelante a pesar de todo eso”, contó a Univisión.
Exactamente una década después de haber sobrevivido al ataque del Cártel Jalisco y a unos meses de haber declarado en EU contra “El Menchito”, Iván Morales Corrales fue asesinado junto a su esposa en Temixco, Morelos. De acuerdo con el reporte, el expolicía viajaba con su pareja a bordo de una camioneta cuando fue abordado y ejecutado en el fraccionamiento Las Brisas. El grupo armado habría disparado en al menos 15 ocasiones para luego escapar a bordo de motocicletas.
Fuente: Sin Embargo