Cada Día de Muertos el Panteón Civil de Dolores en la Ciudad de México se torna de colores morado y amarillo; son las flores de cempasúchil que familiares de difuntos colocan en forma de cruz o ramos para guiar la llegada de sus seres queridos en esta tradición mexicana.
Con sus 240 hectáreas, este panteón es uno de los más grandes de América Latina, y además uno de los más antiguos: data de finales del siglo XIX y aquí yacen desde personajes históricos de México hasta decenas de miles de personas que han sido sepultadas en este cementerio ubicado en el Bosque de Chapultepec.


El señor David y la señora María de la Paz decoran cada año las tres tumbas de sus seres queridos.

Las tumbas son decoradas con flores de cempasúchil y globos o demás adornos.



María Lourdes, su hija y nieto intentan seguir la tradición familiar de adornar las tumbas aunque gran parte de la familia lo ha dejado de lado.

Otras familias como Mariela, su tía y su madre Silvia ponen la música preferida de sus abuelos, llevan globos, papel china, calaveras de fomi y se toman la tarde para decorar.














