PRESENTACIÓN DE RAFAEL MARÍN TITULAR DE LA ANAM
La reforma otorga nuevas facultades a la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) y al SAT, incluyendo convenios tecnológicos con la Agencia de Transformación Digital. También se actualiza el régimen de depósito fiscal y se extiende el uso de recintos fiscalizados estratégicos a programas de diferimiento de aranceles.
Uno de los puntos más polémicos fue la eliminación de medidas de exclusión de corresponsabilidad para agentes aduanales, quienes ahora deberán verificar que las mercancías coincidan con lo declarado en el pedimento. “No se les está pidiendo nada nuevo, solo que hagan bien su chamba”, declaró Rafael Marín Mollinedo, titular de ANAM.
El dictamen también contempla mecanismos de simplificación administrativa, como pedimentos electrónicos, cuentas aduaneras en garantía y revisión en origen. En el régimen transitorio, se establece que las patentes vigentes antes de la publicación del decreto tendrán una vigencia de 20 años, prorrogables si se cumplen los requisitos.
Autoridades fiscales celebraron la reforma como un paso decisivo para combatir el huachicol fiscal y las prácticas indebidas en el comercio exterior, sin necesidad de crear nuevos impuestos. Este viernes, la Comisión de Hacienda se reunirá con representantes del sector privado y sociedad civil para continuar el análisis en lo particular.