¿Has escuchado que los jóvenes ya no quieren tener hijos? A veces, esta frase se pronuncia con extrañeza o rechazo, especialmente cuando el tema surge en una conversación entre adultos. Pero, ¿te has preguntado qué desató esta tendencia y cuáles son los factores que la rodean? La generación Z y las condiciones de su entorno tienen la respuesta.
Los centennials, o miembros de la Generación Z, son las personas que nacieron entre finales de los 90 y los primeros diez años del nuevo milenio; Actualmente, tienen entre 14 y 26 años, y se distinguen del resto de las generaciones porque fueron la primera en crecer en plena era 100% digital.
De acuerdo con la Revista de Estudios de la Juventud, se trata de una de las generaciones más estudiadas en el mundo. Las marcas y empresas han logrado conocer sus gustos e intereses prácticamente en tiempo real, gracias a la tecnología que las rodea. Entre sus características destaca que ya no miran al mundo ni a la familia como lo hacían sus padres o abuelos.
El sociólogo y analista Fernando Aguilar reconoce que la generación Z se describe como “nativa de internet e influida por las pantallas inteligentes”, pero también destaca que es la generación de la incertidumbre económica, laboral y emocional.
¿Ser padre o madre? Ese es el dilema de los centennials
Santiago González tiene casi 15 años, nació en 2010 y, a su corta edad, tiene claro que cuando sea adulto no quiere tener hijos. El estudiante no tiene novia ni planes de estar en una relación seria, pero no se imagina como padre de familia por una razón sustancial: el fuerte golpe al bolsillo de los padres.
El joven descubrió, gracias a un video de TikTok, que los hijos cuestan caro. Según cuenta a La-Lista, en esa red social encontró un clip que detallaba los gastos de alimentación, educación y salud que implicaba criar a un hijo o hija.
“Las parejas gastan desde que se enteran de que están embarazadas: en ecografías, en hospitales, en medicinas, en el parto y después en pañales, leche, ropa, juguetes… y conforme los bebés crecen, más dinero necesitan”, dice.
Antes de ese video, nunca se había cuestionado si quería ser padre, pero después de verlo se le quitaron las ganas que alguna vez tuvo.
La sensación de Santiago no es aislada y retrata una tendencia en México: muchos jóvenes quieren estar solteros y no tener hijos, principalmente por las condiciones económicas. La tendencia comenzó con la generación previa, los millennials, pero los datos apuntan a que crece con los años.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) reveló que entre las mexicanas la tasa de fecundidad disminuyó en los últimos 40 años: mientras que en 1960 las mujeres tenían seis hijos en promedio, en 2021 solo tuvieron uno.
Incertidumbre económica para la Generación Z
Fernando Aguilar Avilés, académico de la UNAM, advierte que es peligroso generalizar sobre la juventud, pues es muy variada y se desarrolla en contextos distintos; Sin embargo, reconoce que las nuevas generaciones enfrentan escenarios económicos más adversos.
“Nuestros abuelos vivieron en una sociedad que les brindaba certezas. Antes, si tenías formación profesional, garantizabas tu ingreso a la vida laboral con seguridad social, prestaciones y una pensión. Eso les permitía organizar sus prioridades, entre ellas, querer tener hijos”.
Ahora, algunas de esas garantías han desaparecido, como el programa de pensiones o la idea de que permanecer en el mismo trabajo por 25 años daría frutos. Aguilar Avilés lamenta que la generación Z crezca rodeada de incertidumbre laboral y sin beneficios que antes permitían construir patrimonio.
“Los jóvenes se enfrentan a la incertidumbre. El modelo económico neoliberal les ha traído falta de certezas no solo en lo laboral”, indica.
En ese sentido, pide que los adultos dejen de imaginar que la juventud caminará por senderos trazados hace 15 o 20 años.
“Debemos cuestionarnos a qué trabajos pueden acceder hoy: en general, son empleos flexibles, sin contrato o con renovaciones mensuales. Eso les dificulta planear su vida a mediano y largo plazo”, sentencia.
El profesor también señala que la falta de condiciones laborales impide acceder a una vivienda digna, lo que modifica los proyectos de vida.
¿’Perrhijos’ en lugar de hijos para los Gen Z?
“Los jóvenes se enfrentan a la incertidumbre. El modelo económico neoliberal les ha traído falta de certezas no solo en lo laboral”, indica.
En ese sentido, pide que los adultos dejen de imaginar que la juventud caminará por senderos trazados hace 15 o 20 años.
“Debemos cuestionarnos a qué trabajos pueden acceder hoy: en general, son empleos flexibles, sin contrato o con renovaciones mensuales. Eso les dificulta planear su vida a mediano y largo plazo”, sentencia.
El profesor también señala que la falta de condiciones laborales impide acceder a una vivienda digna, lo que modifica los proyectos de vida.
¿’Perrhijos’ en lugar de hijos para los Gen Z?
Además de su licenciatura en Psicología, busca diversificar sus opciones de ingreso: “Tengo mucha experiencia en planeación, animación y administración de fiestas infantiles. Estoy lista para tomar ese camino como negocio propio”, afirma.
Hoy en día, el envejecimiento demográfico en México es un hecho, derivado de una mayor esperanza de vida y una menor natalidad. El profesor Avilés advierte que el Estado debe atender este fenómeno antes de que se convierta en un problema mayor.
La tendencia indica que los jóvenes no desean tener hijos, pero más allá de eso surge la pregunta: ¿Qué países se están preparando para cuidar a este sector en su vejez, cuando la pirámide poblacional se adelgace?
Fuente: La Lista