IMPULSAN LA COMERCIALIZACIÓN SUSTENTABLE DEL BALCHÉ: DE TRADICIÓN MAYA A PRODUCTO MODERNO
El balché, una bebida milenaria de origen maya, está siendo revalorizado gracias al esfuerzo de Enrique Eduardo Poot Canul, estudiante del Tecnológico de Felipe Carrillo Puerto. Este elixir, elaborado tradicionalmente con la corteza del árbol balché, miel melipona, anís y canela, busca trascender su uso ceremonial y convertirse en un producto comercial sostenible.
Actualmente, el balché enfrenta retos como la corta vida útil y la extracción poco sostenible del árbol, un recurso endémico cada vez más escaso. Ante esto, Poot Canul trabaja en un proyecto que incorpora técnicas de pasteurización para extender su conservación. Este enfoque no solo permitiría su distribución en mercados más amplios, sino que también abriría oportunidades económicas para comunidades rurales en la Península de Yucatán, preservando al mismo tiempo la tradición y el árbol que le da origen
El proyecto, presentado en el Congreso Internacional de Gestión Pública, combina innovación y sustentabilidad. Se propone además un modelo de cultivo controlado del árbol balché, garantizando un uso racional de este recurso. Poot Canul espera que el balché se convierta en un símbolo cultural representativo, al igual que el tequila para México, y que inspire a las nuevas generaciones a reconectar con sus raíces mayas
Este esfuerzo es clave en la conservación de una tradición ancestral, abriendo camino para que el balché sea reconocido como un legado cultural que trasciende fronteras.