Redacción Macronews.- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reforma normativas y quita el requisito de cinco años de concubinato para acceder a la pensión por viudez, beneficiando a miles de personas que antes quedaban excluidas.
¿Qué requisito se elimina y por qué era un obstáculo?
Hasta hace poco, la Ley del Seguro Social exigía que la persona que solicitaba la pensión por viudez acreditara que el asegurado vivió al menos cinco años con ella en concubinato o que el matrimonio había tenido duración mínima. Esta condición dejaba fuera a muchas viudas o viudos que no cumplían ese lapso. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró inconstitucional la fracción que suspendía la pensión por volver a casarse o entrar en concubinato, eliminando así un impedimento más para los beneficiarios.
Impacto: quiénes quedan ahora beneficiados
Con el cambio, pueden acceder a la pensión por viudez:
Cónyuges reconocidos del asegurado fallecido, sin necesidad de acreditar cinco años previos de convivencia.
Personas en concubinato con el asegurado al momento de su muerte, sin el requisito de duración de la unión.
Beneficiarios de fallecidos que cumplieron con las cotizaciones mínimas del IMSS (al menos 150 semanas generalmente) y derechos vigentes.
Este ajuste representa un alivio para muchas familias que habían sido excluidas pese a cumplir otros requisitos, lo que le da un giro de justicia social al esquema de pensiones.
¿Qué sigue? Trámites, información y recomendaciones
Aunque el requisito eliminado facilita el acceso, los solicitantes deben cumplir con otros requisitos normativos:
El asegurado o pensionado fallecido debe haber estado vigente en sus derechos al momento del deceso y tener el periodo mínimo de cotización ante el IMSS.
El solicitante debe acreditar el vínculo con el asegurado (matrimonio o concubinato).
Es recomendable acercarse al IMSS o a la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) para orientarse sobre documentación, plazos y derechos.
El IMSS continuará revisando sus políticas para simplificar trámites y garantizar que ningún derechohabiente quede excluido de los beneficios que por ley le corresponden. Este avance marca el inicio de una nueva etapa de modernización en la seguridad social mexicana.

























