INSECTOS COMESTIBLES, UNA ALTERNATIVA SOSTENIBLE PARA REDUCIR EL IMPACTO AMBIENTAL DE LA PRODUCCIÓN DE PROTEÍNAS ANIMALES
Redacción Macronews
Ciudad de México, 2 de junio del 2025
El debate sobre el impacto ambiental de la producción de alimentos ha encontrado en los insectos comestibles una opción con beneficios ambientales significativos, según destaca el informe “Edible insects, future prospects for food and feed security” publicado en 2014 por la FAO.
Estudios comparativos muestran que la producción de un kilogramo de carne de pollo genera 4.5 kg de CO₂ equivalente, mientras que el mismo peso en gusanos de la harina (tenebrios) emite solo 2.8 kg, reflejando una reducción importante en gases contaminantes. Además, la cría de insectos requiere menos espacio: 3.07 metros cuadrados por kilogramo, frente a 12.48 metros cuadrados usados para el pollo.
Más allá del aspecto ambiental, la eficiencia en la conversión de biomasa a proteína también es mayor en insectos, con un rendimiento de hasta 100% en comparación con el 40-55% de la carne tradicional. Esta ventaja se suma al bajo consumo de agua y la ausencia de necesidad de instalaciones complejas.
Aunque la aceptación cultural es un reto, en países con tradición entomófaga como México, China y Tailandia, los insectos son parte de la dieta desde hace siglos, mostrando la viabilidad de integrar esta alternativa en la alimentación futura.
Este modelo representa un cambio de paradigma para alimentar a una población creciente sin agotar recursos naturales, posicionando a los insectos como un “superalimento” y una solución viable hacia la sostenibilidad global.
