HAMILTON, CANADÁ. El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, descartó que Washington tenga planes de enviar fuerzas militares a México para combatir a los cárteles de la droga o de tomar medidas unilaterales, pero reiteró su preocupación por la situación de seguridad y afirmó que existen zonas del país «dirigidas y gobernadas por el narco».
Las declaraciones se dieron a la prensa en el Aeropuerto Internacional de Hamilton, en Canadá, donde el funcionario participó en la cumbre del G7.
Cooperación y Avances en Fentanilo
Rubio enfatizó que Estados Unidos está dispuesto a brindar toda la ayuda que México necesite, siempre y cuando sea solicitada.
«Obviamente, no quieren que tomemos medidas unilaterales ni que enviemos fuerzas estadunidenses a México, pero podemos ayudarlos con equipo, entrenamiento, intercambio de inteligencia y todo tipo de cosas que podríamos hacer si lo pidieran. Tienen que pedirlo”, respondió Rubio.
El Secretario de Estado aplaudió los «avances increíbles» logrados en los primeros 10 meses del año con el gobierno mexicano en la lucha para detener el flujo de fentanilo. Aseguró que la cooperación es histórica, aunque reconoció que, por ser un problema arraigado, el progreso medible tomará tiempo.
Cárteles Calificados como «Organizaciones Terroristas»
Al ser cuestionado sobre el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, Rubio condenó el hecho, calificándolo como uno de los muchos asesinatos perpetrados por los cárteles contra periodistas, políticos y jueces.
Rubio insistió en la necesidad de recalificar a estas organizaciones:
«Estos cárteles son muy poderosos… No se trata solo de organizaciones criminales, sino de organizaciones terroristas, pues amenazan la viabilidad y las capacidades de los Estados nación», añadió.
El funcionario concluyó señalando que la presencia de los cárteles es el «problema endémico más grave en la región», pues en algunas zonas de México, estos grupos son «más poderosos que las fuerzas del orden locales o incluso las fuerzas nacionales».
