México fortalece sus acciones para conservar a las tortugas marinas con la publicación de los programas de manejo en cuatro santuarios naturales: Playa Escobilla (Oaxaca), Playa Ceuta (Sinaloa), Playa Cuitzmala (Jalisco) e Isla Contoy (Quintana Roo). Estas zonas están consideradas estratégicas para la anidación, alimentación y conservación de seis especies de quelonios que habitan en el país.
Los programas, publicados en el Diario Oficial de la Federación (DOF), establecen medidas específicas para la protección de los hábitats de estas especies en peligro de extinción. A continuación, te decimos dónde están, cuántas hectáreas abarcan y qué objetivo tienen.
¿Dónde están los santuarios y qué superficie protegen?
Santuario Playa Escobilla, Oaxaca
Se localiza en Santa María Tonameca y abarca 263.13 hectáreas con 18 km de costa. Es una de las playas más importantes del mundo para la anidación masiva de tortuga golfina (Lepidochelys olivacea), además de recibir a la tortuga laúd y la tortuga prieta; eventualmente se han registrado casos de presencia de tortuga carey.
Santuario Playa Cuitzmala, Jalisco
Situado en La Huerta, cuenta con una superficie de 20.92 hectáreas. Es clave para la anidación de tortuga golfina, pero también se han documentado nidadas de tortugas laúd, prieta y carey.
Santuario Playa Ceuta, Sinaloa
Localizado en los municipios de Culiacán, Elota y San Ignacio; protege 503.09 hectáreas. Es relevante por sus campamentos tortugueros y la anidación regular de tortuga golfina y laúd. Tiene infraestructura comunitaria para monitoreo biológico y conservación
Santuario Playas de Isla Contoy, Quintana Roo
Abarca 10.74 hectáreas en una pequeña isla al norte de Cancún. Aunque su extensión es menor, su valor ecológico es enorme por la presencia de tortuga caguama, tortuga verde, tortuga laúd, especies en peligro de extinción, por lo que se constituye como un hábitat de hembras anidadoras y crías y lo convierte en un área prioritaria para la conservación.
México: lugar de tortugas marinas
México es considerado el país de las tortugas marinas, ya que alberga seis de las siete especies registradas a nivel mundial:
- Laúd (Dermochelys coriacea)
- Golfina (Lepidochelys olivacea)
- Caguama (Caretta caretta)
- Verde o prieta (Chelonia mydas)
- Carey (Eretmochelys imbricata)
- Lora (Lepidochelys kempii)
Actualmente, todas se encuentran en alguna categoría de peligro de extinción, de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010. Entre las amenazas están la pérdida de hábitat, el cambio climático, la contaminación, el saqueo de huevos y la pesca incidental.
Éstas son las medidas de los santuarios de tortugas marinas
Los santuarios buscan proteger los espacios donde las tortugas marinas llegan a anidar, alimentarse y desarrollarse. El objetivo principal es asegurar que estas especies —muchas en peligro de extinción— puedan vivir y reproducirse sin amenazas. Para lograrlo, se establecen reglas claras sobre qué actividades están permitidas o prohibidas en estas zonas, se cuida la vegetación, se monitorean las especies y se fomenta la educación ambiental.
En resumen, estos santuarios tienen como metas:
- Proteger las playas de anidación donde llegan miles de tortugas cada año
- Conservar el hábitat natural, como manglares, dunas y arrecifes
- Evitar actividades que dañen el ecosistema, como la pesca ilegal, la contaminación o el turismo descontrolado
- Fomentar el monitoreo, investigación y educación ambiental, para que más personas participen en su conservación
- Mantener la biodiversidad, cuidando no sólo a las tortugas, sino también a otras especies que