El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, decretó recientemente varias reformas al Código Penal Federal que establecen la imprescriptibilidad del ejercicio de la acción penal y la aplicación de sanciones por delitos sexuales cometidos contra menores de 18 años.
Según las modificaciones, que entraron en vigor a partir del 19 de octubre, no prescribirán los delitos cometidos contra menores de edad cuando se trate de pornografía infantil, corrupción de menores, turismo sexual, lenocinio y pederastia.
Tampoco cuando se trate de cópula con persona mayor de 15 años y menor de 18, cuyo consentimiento haya sido obtenido mediante engaños, por violación equiparada a menores de edad o persona que no tenga capacidad de comprender el significado del hecho o por cualquier causa no pueda resistirlo.
En el caso de que el victimario sea servidor público, ministra o ministro de culto religioso, también se castigará con destitución e inhabilitación para desempeñar el cargo, comisión o cualquiera otro de carácter público, durante el mismo tiempo de la sentencia que le sea dictada.
El pasado 8 de febrero la senadora María Guadalupe Covarrubias Cervantes propuso reformar la legislación penal federal para establecer que no se otorgará el perdón a agresores sexuales, cuando las víctimas sean menores de edad.
Además que los acuerdos reparatorios tampoco procedan cuando el imputado haya cometido delitos de violencia familiar o sus equivalentes en los estados.
La funcionaria señaló que cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos ubican a México en el lugar número uno con el tema de abuso y explotación sexual infantil a nivel internacional.
Advirtió que de acuerdo con esos datos más de 5.4 millones de niñas, niños y adolescentes en la nación son víctimas de abuso sexual cada año.
Además, por cada mil casos de abuso sólo 100 se denuncian, 10 llegan a juicio y únicamente un caso alcanza condena.
Añadió qye según la Organización para la Infancia Aldeas Infantiles, seis de cada 10 de estas violaciones se producen en casa y en 60 % de los casos el agresor es un familiar o pertenece a la familia.
La reforma, fue enviada al Poder Ejecutivo en septiembre pasado, refiere que los delitos sexuales cometidos contra menores de 18 años atentan de forma grave e irreparable contra su integridad.
FUENTE: MILENIO