A poco menos de un mes que en una playa argentina sacaran a un delfín del mar para tomarse fotografías con el animal, que moriría en la orilla; nos encontramos con una noticia parecida, esta vez en Macedonia.
La mujer de origen búlgaro que se encontraba en el país por vacaciones, se acercó al Lago Ohrid y tomó a un cisne del ala para arrastrarlo hasta la orilla, con la única intención de tomarse una selfie.
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Al lograr su cometido, abandonó al ave en la orilla y se fue, el animal permaneció inmóvil por mucho tiempo y después murió, según reportes locales.
Varios testigos tomaron fotografías y vieron como el cisne luchaba con la mujer para que lo dejara libre, sin embargo no lo logró.
(FUENTE: EXCELSIOR)