Las medidas que el gobierno de Quintana Roo reforzó a partir del 6 de julio para disminuir la velocidad de contagios por Covid-19, sumadas al esfuerzo de las y los quintanarroenses, tuvieron resultados positivos al disminuir en 43% el número de personas ingresadas a hospitales y lograr un ritmo de contagio (RT) menor al 1%, lo que significa que se necesita más de un portador para contagiar a una persona.
El pasado 6 de julio las autoridades estatales reforzaron las medidas para restringir la movilidad con el cierre de avenidas en zonas de mayor propagación del virus, filtros sanitarios y horario fijo para la venta de alcohol.
¿Cómo sabemos que han estado funcionando estas medidas?
La pandemia de Covid-19 tiene ciclos de 14 días. Entonces del 6 de julio en que se reforzaron las medidas al 20 de julio no se vieron resultados precisamente. Pero a partir del 21 de julio de manera paulatina ha estado bajando la ocupación hospitalaria. Esa es una buena noticia porque permite que nuestro sistema de salud siga funcionando, no se colapse y estén menos llenos los hospitales.
Durante la semana del 5 al 11 de julio llegamos a tener un pico de 142 personas ingresadas en los hospitales y ahora, entre el 23 y 29 de agosto, se registraron 60 ingresos. El registro semanal de ingresos ha mantenido una tendencia a la baja gracias a las medidas y al esfuerzo de la gente.
Asimismo, la tasa o ritmo de contagio (RT) que nos indica cuántas personas puede llegar a contagiar un solo portador, también ha bajado por esas medidas que implementó el gobierno de la entidad. Del 6 al 12 de julio llegamos a tener picos en la tasa de contagio de 1.48 para la zona sur y 1.13 para la zona norte. ¿Qué quiere decir esto? Que un portador del virus estaba contagiando a más de una persona.
Hoy esa tasa ha bajado al 0.88 para la zona sur y 0.86 para la zona norte, cumpliendo con el porcentaje ideal de un RT menor al 1% que es al que aspiran todos los países. Eso significa que se necesita más de un portador para contagiar a una persona.
Por eso se sabe que las medidas implementadas por el gobierno y el esfuerzo de las y los quintanarroenses para aplicarlas, están funcionando. Sin embargo, el gobernador Carlos Joaquín insistió en que «no bajemos la guardia» y sigamos cuidándonos usando cubrebocas, lavándonos las manos frecuentemente y procurando siempre la sana distancia.
De estos hábitos no sólo depende la salud de la población, también la segura y gradual reactivación económica y, por tanto, que las familias puedan recuperar sus ingresos. «En esto, estamos juntos».
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