El modelo de educación a distancia no funciona para más de 16 mil 800 niños de Quintana Roo, ya que presentan el llamado Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDHA), lo que dificulta que presten atención al televisor.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica, al menos 10 por ciento de los 168 mil 890 quintanarroenses de entre cinco a nueve años de edad presentan esta condición. Para ellos no funciona la estrategia nacional para iniciar clases el próximo ciclo escolar 2020-2021 a través de las televisoras públicas y privadas del país.
“Para este grupo de menores de edad, si el aprovechamiento escolar se dificulta dentro de las aulas, todo se complica aún más cuando pretendes que se sienten frente a un televisor para que intenten aprender, pues su hiperactividad e impulsividad se los impide cuando no existe una interacción real”, menciona Javier Vicente Vázquez, psiquiatra infantil y miembro de la asociación Nacional para el estudio del TDAH en México.
El experto explica que lamentablemente el modelo educativo que se implementará en todo el país por cuestiones de la contingencia sanitaria no tomó en cuenta a este sector estudiantil.
Explica que en Quintana Roo no se realizó ningún estudio por parte de las autoridades educativas para conocer la afectación o el rendimiento de estos niños durante los cuatro últimos meses del ciclo escolar 2019-2020, cuando la cuarentena obligó a implementar la enseñanza en línea.
“Entendemos que fue una situación de contingencia sanitaria que nadie tenía previsto, pero las autoridades ya sabían que difícilmente se regresará a clases presenciales en el futuro cercano. Lo advirtieron desde el principio la Organización Mundial de la Salud y la propia Secretaría de Educación Pública, por lo que debieron prever alternativas para los casi 17 mil niños quintanarroenses que tienen esta condición”, comentó.
De lo contrario, dijo, se les está discriminando, lo que afectará su desarrollo personal.
“Urge que padres de familia que tienen estos niños, reciban una capacitación por parte de las autoridades educativas para que tengan las herramientas para ayudar en la enseñanza de sus hijos. Ya están identificados y estamos a tiempo para hacerlo”, concluyó.
FUENTE: Sipse