CANCÚN, Quintana Ro.- Greenpeace México lanzó la advertencia de que el saturado tráfico náutico en la entidad ha generado daños cerca de ser irreversibles en diversos puntos del Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM), siendo los ubicados frente a las costas de Puerto Morelos, Cozumel y Benito Juárez, lo que han presentado un mayor grado de deterioro y advirtió que de no realizarse acciones contundentes en la regulación de la navegación, se podrían generar daños irreparables; autoridades de Conanp han trabajado desde hace varios años en alternativas para la reproducción artificial de arrecifes, pero su ritmo de crecimiento no ha sido lo suficientemente rápido para poder mantener estable el ecosistema.
Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), el Centro para la Diversidad Biológica (CBD) y Greenpeace concluyeron la exploración sobre la salud de los arrecifes del Mar Caribe, en donde encontraron que el estado de conservación de las comunidades arrecifales es mejor en aquellas localidades retiradas de la costa, probablemente debido a la falta de presiones humanas producto del desarrollo costero.
Reducción en la biomasa
A esto se suma que de acuerdo con el informe presentado en 2015 por la Iniciativa por Arrecifes Saludables, que alberga a 60 organizaciones de cuatro países, dieron a conocer más de 16 puntos críticos en el SAM, de los cuales 11 se encuentran en las costas de Quintana Roo, donde se reveló una reducción importante en la biomasa de diversas especies por la sobredepredación, además de deficientes sistemas de tratamientos de aguas negras, que han contaminado los ecosistemas marinos.
Investigadores de la Unidad de Investigación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), apostados en Puerto Morelos, revelaron que en el destino no se presenta el tratamiento de aguas negras terciarios, a pesar que México está sujeto a esto a través del Tratado de Cartagena; dicho tratamiento garantizaría que residuos contaminantes de agua por el uso humano no llegarán al mar.
Sandra Domínguez, profesora investigadora de la UNAM, señaló que la actividad humana ha puesto al SAM próximo a un punto de no retorno, pues la actividad humana ha generado un cambio importante en la densidad de compuestos en el agua que permiten una vida saludable de corales y arrecifes, y que de no hacerse algo, especialmente en la zona de Puerto Morelos, se podría perder el ecosistema marino tal y como lo conocemos.
Confirman lo peor
La organización ecológica a nivel mundial, Greenpeace, realizó investigaciones desde el Rainbow Warrior en diciembre de 2016, en el marco de la COP13, donde se confirmó que en arrecifes muy retirados de la costa (200 kilómetros) fue notoria la falta de depredadores tope (especies de importancia comercial) lo que refleja un efecto de la sobrepesca, aún en estas localidades.
A lo largo de la expedición, los efectos del cambio climático sobre las comunidades coralinas quedaron en evidencia, ya que fue común observar blanqueamiento coralino. Un fenómeno que resulta de la pérdida de la relación simbiótica entre los corales formadores de arrecife y unas microalgas microscópicas, llamadas dinoflagelados, lo que eventualmente puede resultar en la mortalidad de los corales.
La expedición en el barco de Greenpeace zarpó de Cozumel y realizó navegación por 10 días, con el objeto de bucear en zonas coralinas del sistema Arrecifal Mesoamericano.
Análisis
Los estudios establecieron una línea de base sobre el estado de las comunidades de corales y peces que habitan en esos arrecifes, para poder llevar a cabo un análisis de su salud a través de indicadores como abundancia, riqueza y diversidad.
“Los arrecifes de coral que visitamos enfrentan serias amenazas, ya que el Caribe y el Golfo de México están entre las regiones con mayor presión para el uso de sus servicios ambientales. Entre ellas se incluye desde la sobrepesca y la eutrofización (exceso de nutrientes) provocada por el desarrollo costero, hasta el cambio climático en forma de blanqueamiento y acidificación. No obstante, es importante buscar la manera de realizar acciones que beneficien en conjunto a la naturaleza y la sociedad, ya que el buen estado de los hábitats arrecifales es fundamental para conservar la biodiversidad marina en el país y el mundo”, dijo el doctor Héctor Reyes, profesor investigador de la UABCS.
“La degradación de los arrecifes de coral en las costas mexicanas del Mar Caribe y el Golfo de México ha ido aumentando gradualmente desde la década de 1970 debido a una combinación de actividades humanas como la modificación del hábitat, contaminación de fuentes industriales y urbanas, explotación de hidrocarburos, y pesquerías. Por ello este tipo de estudios ayudarán”, dijo Alejandro Olivera.
FUENTE:LAVERDAD