Cancún, QR. El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) no está en condiciones de proponer la expropiación de los terrenos que actualmente ocupa el proyecto Gran Solaris, en playa Delfines –kilómetro 17 de la zona hotelera de Cancún–, pero sí planteará a los inversionistas mudar la obra a otros terrenos a cambio de dejar libre esta playa para uso público.
Así lo confirmó Rogelio Jiménez Pons, director general de Fonatur, quien dijo que la postura de la dependencia a su cargo sigue siendo la de evitar la saturación hotelera de Cancún, sin ahuyentar a los inversionistas, proponiendo acuerdos que permitan canjear terrenos que hoy tienen uso de suelo hotelero por otros de la reserva del fondo en Huatulco o Puerto Vallarta, donde sí se requiere inversión nueva.
Al hotel Gran Solaris le fue revocada hace unas semanas su licencia de construcción por irregularidades detectadas por la Secretaría municipal de Ecología y Desarrollo Urbano de Benito Juárez, luego de que se le inició una revisión ante la inconformidad ciudadana por construirse una barda perimetral que obstruye la vista al mar.
El Gran Solaris es un proyecto hotelero de 450 habitaciones y una inversión de 90 millones de dólares a cargo de la firma Solaris de México.
Jiménez Pons mencionó que el canje de terrenos no es nuevo, pues ya lo han planteado a los promoventes del Riu Riviera Cancún, otro complejo que también se pretende construir en la zona hotelera de Cancún, a cuyos dueños pidió no continuar con la obra por encontrarse en una zona frágil ambientalmente y suponer la sobrecarga de los servicios de drenaje y agua que actualmente proporciona Fonatur; a cambio les propuso canjearles sus terrenos por otros de igual valor dentro de la reserva en otro de los Centros Integralmente Planeados del país como Huatulco.
“No queremos espantar la inversión, pero no estamos de acuerdo que se dé una sobreexplotación de lo que ya está muy sobrecargado. Lo que hoy pudiera ser considerado como una ganancia para la región en términos de inversión, a la larga se va a perder por la sobrecarga del entorno”, aseguró.
Autorizaciones
El funcionario añadió que en el caso de Cancún hubo muchas autorizaciones para sobredensificar la zona hotelera.
Sugirió que esto pudo ocurrir con el hotel Gran Solaris, que pretende construirse sobre terrenos que anteriormente eran propiedad de Fonatur, pero fueron vendidos en una zona que forma parte de una de las últimas playas públicas de Cancún.
Este complejo se enfrenta a una oposición de ambientalistas que argumentan que se privatizaría una de las últimas ventanas al mar en la zona hotelera.
Texto/ Fotos: Jesús Vázquez/ El Economista / https://www.eleconomista.com.mx/