Familiares y amigos despidieron a Alondra, la niña de 11 años, quien perdió la vida en un ataque armado, en donde fue tomada por otro sujeto como escudo en la colonia Valle Verde de Cancún.
Fue esta mañana del lunes, cuando la despidieron en su misma vivienda, un ataúd rodeado de flores y veladoras, amigos y vecinos fueron quienes acompañaron a los familiares de la menor.
El cielo se nubló en Valle Verde. No por las nubes, sino por el dolor que arrasó con una colonia entera al despedir a Alondra, una niña de tan solo diez años, cuya vida fue arrebatada de la manera más brutal e injusta.
Su risa infantil, sus sueños por cumplir, sus días de juegos quedaron apagado el pasado domingo, cuando un hombre decidió utilizarla como escudo humano en un enfrentamiento armado.
Alondra había salido a la tienda, como lo hacía tantas otras veces. Era un día como cualquier otro, pero terminó siendo el último. En su camino no encontró dulces ni juguetes, sino el destino cruel de una sociedad que hace tiempo perdió el rumbo. Hoy, en un ataúd blanco, ese pequeño cuerpo que nunca conoció la maldad yace entre flores y lágrimas, mientras su familia y amigos intentan asimilar lo inaceptable.
El dolor es profundo, pero también lo es la indignación. ¿Qué dirán las autoridades ahora? ¿Buscarán una excusa, un giro absurdo que intente justificar lo injustificable? En un municipio donde la inseguridad se disfraza de discursos vacíos, la muerte de Alondra no es una cifra más: es una herida abierta en el alma de quienes aún creen en la justicia.
Este Día de Reyes, en lugar de risas y regalos, la colonia Valle Verde está de luto. La niña que alguna vez soñó con muñecas y pasteles ahora descansa en paz, lejos de un mundo que no supo protegerla. Su historia debería ser un grito, una llamada urgente para cambiar lo que está roto, pero el eco de su partida se mezcla con el silencio de un sistema que parece sordo al dolor de su gente.
Alondra, tu luz no se apagará en quienes te recuerdan. Pero para el resto de nosotros, tu ausencia será un recordatorio perpetuo de una ciudad donde hasta la inocencia puede ser ejecutada.
FUENTE: https://www.facebook.com/musicadeculquiergenero
Cancún: Familiares y amigos despiden a Alondra, la niña de Valle Verde que fue acribillada