
Redacción Macronews.- La temporada alta de verano en Quintana Roo dejó un balance positivo con la llegada de 2.2 millones de turistas nacionales e internacionales, una derrama económica superior a los 1,991 millones de dólares y una ocupación hotelera promedio del 69%, lo que significó que más del 30% de las camas disponibles permanecieran sin ocupar.
Pese a los desafíos derivados del sargazo y del contexto económico global, el flujo turístico se mantuvo estable y mostró un incremento en el gasto por visitante. Como resultado, la recaudación del impuesto al hospedaje registró un alza de más del 17% durante el primer semestre de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior, reflejando un mayor dinamismo en el sector.

El verano también consolidó el atractivo del estado en segmentos especializados como el turismo de bodas y convenciones, que contribuyen a sostener la ocupación en temporadas bajas.
En cuanto a infraestructura, Quintana Roo se mantiene en expansión con más de 136 mil habitaciones disponibles, una cifra que coloca al destino por encima de grandes ciudades turísticas como París, Madrid y Londres, y que lo perfila para competir en los próximos años con polos internacionales como Las Vegas, que cuenta con 150 mil cuartos.

La temporada alta de invierno se vislumbra ahora como el siguiente reto, en un escenario donde la diversificación de la oferta y la capacidad de resiliencia turística siguen posicionando al estado como uno de los destinos más sólidos de América Latina.
















