Las construcciones deben de estar bien piloteadas hasta la roca dura porque es zona kárstica, detalló.
Las ciudades costeras de Quintana Roo deben estar preparadas para soportar el embate de fenómenos hidrometeorológicos de gran magnitud para evitar catástrofes, como la ocurrida recientemente en el estado de Guerrero, señaló Francisco Bautista, investigador titular del Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El investigador explicó que destinos como Tulum se ubican en una zona kárstica, a la que técnicamente también se le llama kars reciente, y eso quiere decir que está en una superficie con calizas donde hay hoyos como cenotes o simplemente dolinas, es decir, huecos sin agua.
Por ello, apuntó, hay colapsos frecuentes desde Chetumal hasta Cancún y advirtió que debe vigilarse, no construir carreteras, mega estructuras como puentes y también casas-habitación en zonas donde haya estas cavidades.
“Lo más normal es que sí tengan esos hoyos en la mayoría de las superficies y que, por lo tanto, las construcciones, por muy ligeras que sean, deben de estar bien piloteadas hasta la roca dura. Piloteadas es que se haga una columna como los castillos en la construcción”, sostuvo.
Añadió que toda la planicie costera kárstica tiene suelos de un espesor muy pequeño, a lo que se le denomina leptosoles, y esos suelos no protegen el acuífero, de manera que toda la basura y todos los contaminantes que se generen en superficie van a dar al acuífero irremediablemente y luego al mar.
Puntualizó que Tulum se está organizando rápidamente y consideró que de manera desordenada. “Sería bueno que se realizaran los planes de construcción de zonas habitacionales, que hubiera refugios antihuracanes tipo 5 y que los refugios fueran construidos como tales, es decir, que resistan. Que el reglamento de construcción incluya el uso de ventanas que aguanten vientos de los huracanes, que van arriba de los 150 kph”, acotó.
Francisco Bautista detalló que cuenta con un blog donde está la información de las recomendaciones para todas las ciudades costeras del país, tanto del oriente como del occidente, para saber cómo estar preparadas siempre para huracanes tipo 5.
“Hay algo que se llama el principio precautorio, que dice que hay que tomar medidas de protección ante los grandes peligros, aún cuando no se sepa con precisión cuándo van a ocurrir”, concluyó.
FUENTE: LA JORNADA MAYA