Mara Lezama transforma el presente de Quintana Roo con acciones que cuidan el medio ambiente y fortalecen la economía del mar
Chetumal.— El Gobierno del Estado de Quintana Roo, encabezado por la gobernadora Mara Lezama Espinosa, a través de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (SEDARPE), continúa con la entrega de tarjetas electrónicas correspondientes al Programa Impulso a la Productividad de la Pesca y Acuacultura – Apoyo en Veda para Pescadores. Esta acción forma parte de una nueva forma de gobernar que prioriza el bienestar de las familias, el trabajo en territorio y el acercamiento directo de los servicios a las comunidades.
En cumplimiento del Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, se otorgan apoyos por un monto total de 3 millones 598 mil pesos, beneficiando a 1,251 productoras y productores pesqueros pertenecientes a seis cooperativas, distribuidas en los municipios de Othón P. Blanco, Bacalar, Felipe Carrillo Puerto, Tulum, Cozumel, Solidaridad, Puerto Morelos, Benito Juárez, Isla Mujeres y Lázaro Cárdenas.
En este gobierno humanista y con corazón feminista, se reconoce el trabajo de las cooperativas dedicadas a la pesca que operan bajo criterios de sostenibilidad y conservación. Estas prácticas permiten generar ingresos estables para las familias pesqueras, al tiempo que protegen los ecosistemas marinos del Caribe mexicano.
Durante el evento, el titular de la SEDARPE, Jorge Aguilar Osorio, destacó que las entregas continúan en el estado y que estas acciones reflejan una política pública centrada en las personas, que reconoce el valor de la pesca como actividad económica, cultural y ambiental.
Asimismo, se resaltó el trabajo de cooperativas que han adoptado prácticas sustentables al incorporar la pesca deportiva recreativa, evitando la captura de especies clave como el sábalo, la palometa, el macabí, el robalo, entre otros.
El otorgamiento de este apoyo económico, a través de tarjetas electrónicas, permite que las personas pescadoras adquieran productos básicos alimenticios durante la temporada de veda.
Cada entrega representa una decisión concreta orientada a la prosperidad compartida, al fortalecimiento de las economías locales y a la protección de los recursos naturales. Esta nueva forma de gobernar transforma realidades, dignifica oficios y construye desarrollo desde las raíces comunitarias.