A más de 18 meses de haber sido publicada en el Periódico Oficial del Estado, la Ley Chaleco continúa sin una fecha definida para su aplicación en Quintana Roo.
El Instituto de Movilidad del Estado (Imoveqroo) mantiene en revisión los distintos escenarios y excepciones que deberán reflejarse en el reglamento, el cual, según su titular Rafael Hernández Kotasek, estará listo antes de que concluya 2025.
“Una ley como esta, que ha sido tan controversial, merece ser bien analizada. El reglamento está en proceso, casi listo, pero siguen saliendo situaciones que se deben revisar con cuidado”, declaró el funcionario en entrevista.
¿Qué complicaciones enfrenta la Ley Chaleco en Quintana Roo?
De acuerdo con Hernández Kotasek, uno de los principales retos es evitar que la norma derive en medidas desproporcionadas o difíciles de implementar.
Por ejemplo, se analiza cómo aplicar la ley a personas que solo están de paso por el estado, motociclistas con placas foráneas o repartidores cuyas mochilas no permiten mostrar un chaleco visible.
La ley obliga a que los motociclistas porten dos elementos de identificación:
- Un chaleco con la placa visible.
- Un holograma emitido por el estado.
No obstante, el director de Imoveqroo aseguró que el reglamento brindará márgenes de flexibilidad y aplicará criterios diferenciados con base en análisis técnicos de seguridad y operatividad.
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Excepciones, cilindrada y perfiles de riesgo
Uno de los puntos más discutidos ha sido el tipo de motocicletas involucradas en delitos. Según Hernández Kotasek, muchas de las infracciones se cometen con unidades pequeñas y, en varios casos, robadas. En contraste, motocicletas de alto cilindraje podrían quedar fuera de ciertos requisitos.
“¿A poco has visto un asalto en una Harley?”, cuestionó el titular del Imoveqroo, quien planteó que, si el objetivo es la identificación mediante cámaras, se podría comenzar con el uso obligatorio del holograma y luego evaluar la necesidad del chaleco.
Además, destacó que el proceso de implementación debe considerar la realidad del parque vehicular y la diversidad de usos de la motocicleta, por lo que “no todo se aplicará al mismo tiempo ni a todos por igual”.
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Entre la legalidad y la inconformidad ciudadana
La ley, aprobada el 12 de diciembre de 2023, ha desatado controversias. Hasta la fecha, se han promovido al menos 300 amparos por parte de ciudadanos y colectivos de motociclistas que argumentan violaciones a derechos como la libertad de tránsito y la presunción de inocencia. De esos, al menos 130 suspensiones provisionales han sido otorgadas.
Hernández Kotasek subrayó que esta experiencia ha obligado al instituto a ser cauteloso en la redacción del reglamento:
“Hemos visto muchas iniciativas que se aprueban y de inmediato vienen los amparos porque están mal hechas. En todas las leyes, el qué es fácil; lo difícil es el cómo. Esta ley exige un proceso cuidadoso para que se aplique de manera ordenada y con claridad para todos”.
Seguridad sí, pero con sentido común
Finalmente, el funcionario reiteró que el objetivo es garantizar seguridad sin afectar a quienes hacen un uso legítimo de las motocicletas:
“Lo que queremos es que quien use una moto para delinquir no lo haga impunemente, pero también que quienes la usan para trabajar o trasladarse no se vean perjudicados”.
Fuente: https://24horasqroo.mx/2025/07/04/ley-chaleco-quintana-roo-3/