La compañía señaló que los seguros vehiculares no son ajenos a esta problemática, y para evitar ser víctimas de estafadores, la mejor defensa es la información.
Destacó que la primera recomendación básica es contratar la póliza a través de los canales oficiales de la compañía correspondiente. En caso de hacerlo mediante un agente de seguros, es importante verificar su registro en el sitio web de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) para garantizar su legitimidad. Los registros de los agentes se renuevan cada tres años para ofrecer certeza y legalidad a la población.
Además, es crucial revisar la carátula de la póliza para asegurarse de que estén claramente especificados los siguientes datos: nombre y domicilio del asegurado, nombre de la institución aseguradora, descripción del vehículo, coberturas contratadas, suma asegurada, deducible, prima, vigencia, forma de pago, número de póliza y número de endoso.
La empresa recomienda que los depósitos o transferencias a una compañía nunca se realicen a cuentas de personas físicas con nombre y apellido. Es esencial corroborar que el pago solicitado sea a nombre de la empresa y que las cuentas referenciadas hayan sido proporcionadas oficialmente.