Quintana Roo fue una de las 10 entidades con mayor crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) durante 2019, con un incremento de 1.4 por ciento con respecto a 2018, en medio de un escenario nacional donde más de la mitad de las entidades federativas terminaron con números rojos.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el año pasado sólo 11 entidades federativas cerraron con un crecimiento superior a uno por ciento. Para el resto, hubo pérdidas de hasta el 8.6 por ciento, como es el caso de Baja California Sur, el principal competidor de Quintana Roo en cuanto a crecimiento, principalmente del sector de servicios.
De acuerdo con la definición del Banco de México, el Producto Interno Bruto es una forma de medir el crecimiento económico de un país. Se trata de una suma del valor de todos los bienes, servicios e inversiones que se producen durante un año, por entidad federativa y a nivel nacional.
Una tasa de crecimiento positiva significa que habrá más inversión en edificios, casas o maquinaria y que se producirán más bienes y servicios, lo que se traduce en más empleo y más oportunidades para hacer negocios.
Por el contrario, en los estados que cerraron 2019 en números rojos, lo que desencadena la recesión es la pérdida de empleos que afecta directamente a las familias.
En Quintana Roo las actividades de más crecimiento (5.5 por ciento) fueron las relacionadas con el sector secundario, es decir, las relacionadas con las industrias manufactureras, la construcción y la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica y suministro de gas por ductos, entre otras.
La peor caída (-16.4 por ciento) se registró en el sector primario, integrado por actividades como la agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza.
El principal sector productivo en Quintana Roo, que es el terciario relacionado con los servicios turísticos, registró un incremento de 1.1 por ciento.
La suma de los tres, con el impacto que cada sector tiene en la economía local, da un balance positivo en comparación con la mayoría de los estados del país.
Sin embargo, aunque los resultados del incremento o caída del PIB estatal se verán reflejados hasta el 2021, se prevé que Quintana Roo sea uno de los estados más golpeados económicamente por la pandemia, tras el cierre por varios meses de la principal actividad económica de la región.
En septiembre pasado, el Instituto para el Desarrollo y Financiamiento (Idefin) estimó una pérdida para este año del 5.9 por ciento del PIB estatal, la baja más abrupta desde la fundación de Quintana Roo en 1974.
FUENTE: Sipse