CANCÚN, Q. Roo.- La violación a las normas ambientales en playas de la zona hotelera de Cancún sigue a la orden día, mientras las delegaciones de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) brillan por su ausencia.
Es el caso del Atracadero Molla Nero, a cargo de la empresa Business & Enviroment Balance S. A. de C. V., que se construye en plena violación al título de concesión otorgada a la empresa en 2012.
Desde hace unas semanas, en el kilómetro 6.3 de la Zona Hotelera de Cancún, en playa Tortugas, un predio que ocupa alrededor de 600 metros cuadrados de la Zona Federal Marítimo Terrestre, se edifica un muelle que servirá como atracadero de embarcaciones menores de recreo, deportivas y turísticas para el embarque y desembarque de personas.
La obra viola, de forma flagrante, las normas ambientales porque la concesión DGZF-826/12 otorgada en diciembre de 2012, establece claramente que se da a la empresa el derecho de uso, ocupación y aprovechamiento del área, exclusivamente para el uso de ornato, según el expediente 1193/QROO/2012, consta en una denuncia presentada desde el inicio de los trabajos.
La categoría de “ornato” es aquella que “se dé a superficies ocupadas en las cuales se hayan realizado obras de ingeniería civil, cuya construcción no requiera de trabajos de cimentación, y que estén destinadas exclusivamente para el embellecimiento del lugar o del esparcimiento del solicitante, siempre y cuando no estén vinculadas con actividades lucrativas”, señala la legislación federal.
Los trabajos por parte de la empresa Business & Enviroment Balance S. A. de C. V., propiedad de Hilbert IV Vázquez Montiel y Alejandro García García, cuentan con una autorización de Manifestación de Impacto Ambiental, la cual nunca pasó a manos de las oficinas centrales de la Semarnat.
Además, el mismo documento detalla que la obra servirá como atracadero para embarcaciones turísticas, es decir, su operación estará relacionada con actividades de lucro.
En el sitio se puede observar a trabajadores colocando pilotes de madera como parte de la edificación del muelle que según los documentos tendrá una superficie de 900.16 metros cuadrados.
La obra incluye el arranque del atracadero, un andador, una recepción de dos niveles con palapa y techumbre de pastos secos, una plataforma octagonal en la que se instalará una segunda palapa de madera con techumbre de pastos secos, además de un área para operación de embarcaciones.
Trámite y objeto de la concesión
La concesión a la empresa, constituida en Cancún originalmente por Hilbert IV Vázquez Montiel y Fermín Monje Montiel, fue avalada en 2012 por José Luis Gutiérrez Miranda, entonces titular de la Dirección General de Zona Federal Marítimo Terrestre y Ambientes Costeros de la Semarnat.
“La presente concesión tiene por objeto otorgar a la concesionaria el derecho de usar, ocupar y aprovechar una superficie de 597.43 metros cuadrados de zona federal marítimo terrestre ubicada en el bulevar Kukulcán Km. 6.3, zona hotelera, localidad de Cancún, municipio de Benito Juárez, estado de Quintana Roo, exclusivamente para uso de ornato”, señala la primera cláusula del objeto de la concesión.
Además, la cláusula novena, establece como causas de revocación dar al sitio un uso distinto al autorizado, realizar obras no autorizadas, dañar ecosistemas como consecuencia del uso y aprovechamiento del bien, entre los principales
El 6 de julio de 2018, la Semarnat a través de la misma Dirección General de Zofemat, autorizó una actualización de las bases y condiciones, que fue notificada a la empresa Business & Enviroment Balance S. A. de C. V. a través de la resolución 1308/18.
Sin embargo, el trámite fue únicamente para ajustar el cuadro de coordenadas del terreno a la delimitación oficial vigente, es decir, en ningún momento se cambió la modalidad del documento que sigue siendo de ornato.
“Se modifican las bases y condiciones de la concesión DGZF-826/12, en virtud de los cual la superficie actualmente concesionada es de 600.01 metros cuadrados de la zona federal marítimo terrestre”, detalla la primera cláusula del documento en poder de Novedades Quintana Roo.
La construcción de esa obra fue autorizada por las autoridades, haciendo a un lado, las especificaciones de la concesión, por lo que al igual que otras edificaciones en la zona hotelera, fue denunciada en su momento ante las autoridades ambientales, sin embargo, hasta la fecha sigue sin ser investigada.
El problema se agrava porque, a más de un año de haber iniciado la nueva administración del gobierno federal, las dos instancias encargadas de vigilar y proteger el medio ambiente (Profepa y Semarnat) siguen sin un representante en Quintana Roo.
En más de una ocasión, Arturo Abreu Marín, el representante del presidente Andrés Manuel López Obrador en el estado, ha salido a anunciar que pronto se designarán a las personas que serán los responsables de esas oficinas, aunque los anuncios se han quedado en eso.
FUENTE: Sipse