Redacción Macronews.- A los 14 años, cuando aún se encontraba en la cima de su popularidad internacional, Macaulay Culkin tomó la decisión de alejarse de la actuación para vivir una adolescencia normal, luego de una infancia marcada por la presión, el aislamiento y largas jornadas de trabajo en los rodajes, donde rara vez convivía con personas de su edad.
En entrevista con la revista People, el actor explicó que su retiro temprano respondió al deseo de experimentar actividades propias de un adolescente y escapar de la soledad que acompañó su éxito en películas como Mi pobre angelito y Mi pobre angelito 2. Culkin recordó que durante años grabó escenas prácticamente solo, perdió celebraciones importantes y no participó en trabajos grupales, lo que lo llevó a sentirse aislado en una etapa clave de su desarrollo personal.

El actor también señaló que la relación con su padre, Kit Culkin, influyó de manera determinante en su infancia y carrera. Tras la separación de sus padres en 1995, el distanciamiento fue definitivo. En diversas entrevistas, Culkin ha denunciado que fue víctima de abuso físico y psicológico, asegurando que nunca recibió reconocimiento emocional, como escuchar la palabra “orgulloso” durante su niñez.
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La fama precoz y la dinámica familiar impactaron profundamente su percepción emocional. Culkin confesó que ver sus propias películas le generaba una sensación de soledad extrema y que nunca buscó la notoriedad, pues simplemente comenzó a actuar porque era bueno en ello. En la adultez, ha logrado construir una vida estable junto a su pareja, Brenda Song, con quien tiene dos hijos, Dakota y Carson.
Actualmente, Macaulay Culkin afirma que la paternidad le permitió romper con los patrones de su infancia y ofrecer a sus hijos el amor, la presencia y el reconocimiento que él mismo necesitó. Lejos de los reflectores que lo marcaron en los años noventa, el ex ícono infantil asegura haber encontrado una vida plena y auténtica, basada en la familia y el bienestar personal.




















