Se ha hecho buen trabajo en turismo. De visita en Santiago de Chile…
Se ha hecho buen trabajo en turismo. De visita en Santiago de Chile (una de las ciudades con mejor calidad de vida en Latinoamérica), un grupo de periodistas del continente identifica a un Cancún ajeno al escándalo y la polémica, binomio que lamentablemente se impone cuando se habla de México.
Tras los tópicos en torno a “El Chapo” Guzmán y los 43 de Ayotzinapa, los atractivos de nuestro destino son conocidos o deseados por una amplia mayoría, si acaso por todos. Los profesionales saben –como también los habitantes de este país sudamericano– que la inseguridad de estados como Guerrero, Michoacán o Sinaloa, no se sufre en Quintana Roo.
Prevalece el consenso acerca de que los temas que hoy dominan en el extranjero (“El Chapo” y los 43) son coyunturales, y que en algún momento la extraordinaria cultura milenaria, la buena música e incluso las telenovelas mexicanas retomarán los primeros lugares en el imaginario colectivo en esta parte del mundo. De Cancún, en cambio, se hablan maravillas aun cuando desconocen su dinámica diaria.
En definitiva, se ha hecho una chamba impresionante en difusión, promoción, servicio y posicionamiento. La semana pasada, el presidente de Benito Juárez, Paul Carrillo de Cáceres, reiteró en el marco del programa “Ponle una Estrella a tu Servicio Turístico” que el esfuerzo, la entrega, la calidad, la calidez y la honestidad de quienes atienden a millones de turistas durante su visita, son los mejores atributos para presumir ante el mundo. Y tiene razón.
La calidad de los servicios y la calidez de la gente que hace turismo rara vez se ve en Latinoamérica, sobre todo en esta región del subcontinente, donde el rubro representa aquí mucho menos del PIB comparado con México, o califican de “inalcanzable” cifras como los 19 millones de pasajeros en el aeropuerto y los casi 5 millones de visitantes. Esto último, porque la industria no es tan desarrollada, la vocación no es igual ni la cortesía es la misma.
“Por su vocación de servicio al trabajar por esta ciudad otorgamos estos reconocimientos emitidos tanto de sus empresas, así como de la autoridad municipal; premio que ha sido un éxito en esta administración 2013-2016, ya que es una estrella para todos ustedes a la excelencia en el turismo”, sentenció atinadamente Paul durante la pasada entrega del distintivo.
Esa ha sido la clave del éxito: trabajar en conjunto para “blindar” la imagen de un destino muy bien calificado, por lo que debe ser prioridad seguir procurando el recurso humano y la hospitalidad natural ofrecida por quienes laboran en empresas turísticas, instituciones de gobierno y en otras instancias involucradas en el liderazgo.
Pese a las carencias y los desafíos por el constante crecimiento urbano, el cual está irrumpiendo en las extensas áreas verdes, hoy más defendidas que nunca, siguen predominando los números positivos y la proyección que da esperanzas en asuntos como inversión, empleos o crecimiento económico.
¿Dos ejemplos? Este nuevo apogeo ha llamado la atención de inversionistas, quienes siguen colocando sus capitales en la zona: el año pasado fueron abiertos mil 676 nuevos cuartos de hotel, hasta cerrar con 36 mil 475.
La semana pasada las autoridades del sector aseguran que con la promoción de Quintana Roo en 11 de las principales ferias turísticas del mundo se logró incrementar el número de vuelos y de frecuencias hasta alcanzar los 19 millones 596 mil 485 pasajeros atendidos en el Aeropuerto Internacional de Cancún, lo cual representa un aumento del 12.26% comparado con 2014. Este año, reiteraron, serían más de 20 millones.
Mientras otros sueñan con esta realidad, en Cancún se preparan a largo plazo.