…LA ENTREVISTA A JOAQUÍN ‘EL CHAPO’ GUZMÁN PARA ROLLING STONE FUE UN FRACASO PORQUE NO LOGRÓ EL OBJETIVO DE REACTIVAR LA DISCUSIÓN SOBRE LA GUERRA CONTRA LAS DROGAS
SANTIAGO J. SANTAMARÍA
Sean Penn se arrepiente, y mucho, de su entrevista con uno de los hombres más buscados del mundo, el narco mexicano Joaquín Guzmán Loera, ‘El Chap.
Pero no lo hace por haberse encontrado con el capo ni por haber servido presuntamente como pista clave para dar con ‘El Chapo’, extremo que él niega. Su entrevista para Rolling Stone fue un “fracaso” porque no logró su objetivo, dice, de reactivar la discusión sobre la guerra contra las drogas.
“Lo que lamento es que toda la discusión sobre este artículo ignora su objetivo, que era intentar contribuir a esta discusión sobre la política de la guerra contra las drogas”, dice Penn en una entrevista con la cadena CBS, la primera que otorga desde que el sábado 9 de enero publicó su controvertida entrevista en la revista estadounidense.
La entrevista con El Chapo debería haber servido como plataforma para “empezar esta conversación”. No lo hizo y por eso, continúa Penn, la entrevista ha sido un “fracaso”. “Déjeme ser claro. Mi artículo ha fracasado”, lamenta el actor en la entrevista, emitida en el programa ‘60 Minutes’. “Lo que todos queremos es que este problema de la droga pare. Queremos que los asesinatos en Chicago paren. Nosotros somos el consumidor. Estés de acuerdo o no con Sean Penn, hay una complicidad aquí (…) ¿Y cuánto tiempo se ha pasado esta última semana desde que salió la entrevista discutiendo eso? ¿Un uno por ciento? Eso sería hasta generoso”, lamenta Penn.
El tono se le endurece al actor estadounidense cuando se le pregunta sobre las afirmaciones del Gobierno mexicano de que sus contactos con ‘El Chapo’ facilitaron su captura y afirma que el ejecutivo de Enrique Peña Nieto tiene un objetivo claro: que vayan a por él. ¿Cree que el gobierno mexicano quería que se le echara la culpa de la captura y ponerle en peligro?, le pregunta el periodista. “Sí”, responde Penn. ¿Quería (el gobierno) ponerle en el punto de mira del cartel?, insiste el periodista. “Sí”, vuelve a responder sin titubear. Aun así, sostiene que no teme por su vida.
Penn tampoco llega a negar taxativamente que su encuentro con ‘El Chapo’, a comienzos de octubre, haya tenido algo que ver con la captura del capo, pero pone en duda la versión oficial de México sobre el vínculo directo entre los dos acontecimientos. “Existe este mito sobre la visita que hicimos mis colegas y yo a El Chapo acerca de que fue, como citan al fiscal general de México, ‘esencial’ para su captura”, señala Penn. Y agrega: “Nosotros nos habíamos reunido con él muchas semanas antes, el 2 de octubre, en un lugar que no estaba para nada cerca de donde fue capturado” en enero, recuerda. Sin embargo, cuando el periodista insiste y le pregunta si piensa que su entrevista no tuvo nada que ver con la captura de ‘El Chapo’, no da una respuesta tan directa. “Lo que sabemos es que el Gobierno mexicano estaba claramente humillado por la idea de que alguien lo hubiera encontrado antes que ellos. Bien, nadie lo encontró antes que ellos. Nosotros no somos más listos que la DEA o la inteligencia mexicana. Teníamos un contacto a través del cual pudimos gestionar una invitación”, replica Penn.
Joaquín, el de la horrenda camisa de 138 dólares, comprada en Los Ángeles, de color azul, manchada de negro, de diseño iraní
Penn sugiere que es la envidia la que ha motivado muchas de las críticas recibidas por obtener “la historia que todos los periodistas del mundo querían”. Reconoce a la vez que su papel como periodista “no deja de ser controvertido”. Pero reta a quien ponga en duda su capacidad para ejercer como tal. “Cuando algunos periodistas dicen que no soy periodista… bien, me gustaría ver qué licencia tienen que dice que son periodistas”, comenta. A la par sin embargo, según CBS, el actor admite que sí consiguió el encuentro con ‘El Chapo’ fue porque no es un periodista tradicional.
Eso sí que es verdad pues logró hacer una entrevista no tradicional, sin preguntas al entrevistado. Si uno ve el video del narcotraficante, estamos ante un monólogo o un discurso. Muy poco provecho pudiera sacar de Joaquín, el de la horrenda camisa de 138 dólares, comprada en Los Ángeles, de color azul, manchada de negro, de diseño iraní, empeñado en destacar que la exclusiva de su ‘entrevista’ era de la señorita Kate del Castillo. ‘El Chapo’ no conocía ni de oídas a Sean Penn, hasta que le presentaron en su encuentro con su ‘Reina de Sinaloa’. Era el convidado de piedra, que no fue capaz o no tuvo valor de decirle al ‘narcoactor’ lo que explicaba en ‘60 Minutes’, que había que evitar más muertes… El interés de ‘El Chapo’ no era otro que el de Kate del Castillo. Curiosamente, días después del encuentro la mexicana ocupaba portada de la revista rosa española ¡Hola! y desmentía un posible idilio con Sean Penn. Joaquín es un hombre tradicional con las mujeres y rechaza quereres compartidos. Él es ‘El Señor’, el mero mero.
En España y en Latinoamérica todo el mundo quiere saber qué es lo que paso entre Kate del Castillo, ‘El Chapo’ Guzmán y Sean Penn. Los actores fueron a visitar al prófugo más sanguinario y célebre del momento a su casa-refugio en Sinaloa, donde estaba concentrado trabajando en sus cosas, entre las que está un reciente lifting, ponerse la ‘bombita’ ante tanto Viagra adulterado e ineficaz, y descalificar de nuevo al sistema judicial y carcelario de México. La visita fue cuidadosamente vigilada por las fuerzas del orden y resultó ser crucial en la captura del escurridizo narcotraficante. Los mass media mexicanos y extranjeros así lo aseguran. Kate y Sean se metieron 14 horas de viaje a través de las montañas de Sinaloa para entrevistarse con el capo. Es curioso que ellos sí pudieran hacer lo que las fuerzas de seguridad mexicanas y estadounidenses no consiguieron durante meses.
En ‘Gringo viejo’, Carlos Fuentes noveló las peripecias del periodista Ambrose Bierce, que se unió como cronista al Ejército de Pancho Villa
Eso no justifica irrumpir en la casa de alguien cuando está trabajando. Con el debate encendido de si Kate y Sean han hecho algo ilegal o poco ético, sorprende cómo cambia la opinión acerca de la actriz. Unos realzan su coraje, otros más bien lo aplastan. Lo que no deja de asombrar es que un supervillano como ‘El Chapo’ haya sido atrapado con un vestuario tan pobre, una camiseta manchada de tierra, más parecido a un albañil que a los galanes con ojos azules y gestos rudos de las narconovelas que inspira. Seguramente ‘El Chapo’ no tiene los asesores de los ex duques de Palma, la infanta Cristina y su esposo el vasco Iñaki Urdangarín, que escogieron bien vestuario y maquillaje para dar pena al inicio de su juicio. Así es enero, un mes para tener cintura y aguantar a toda esta gente.
En ‘Gringo viejo’, el mexicano Carlos Fuentes noveló las peripecias del periodista Ambrose Bierce, que se unió como cronista al Ejército de Pancho Villa para acabar, según se cree, fusilado en Chihuahua. Otro estadounidense se ha paseado recientemente por México para entrevistar a ‘El Chapo’ Guzmán, rey de los narcotraficantes. En este caso, cabría hablar de gringo bobo, no solo porque Sean Penn encaja en la definición del bourgeois bohème, sino además por su derroche de vanidad e infantilismo.
‘Fascinación eterna por el déspota’, es una columna que ha escrito Maite Rico. Esta periodista española considera que Sean Penn encarna al prototipo de ‘celebrity’ concienciada, pero indocumentada, que busca líderes alternativos en sus ratos libres…
‘Celebrity’ busca autócratas de viejo cuño, Pablo Neruda amaba a Stalin y Pol Pot gozó de popularidad entre ciertos intelectuales franceses
“A Penn le ha fusilado el gremio periodístico: el texto es penoso y la entrevista, absurda y reverencial. Al final el actor es el protagonista intrépido que se juega la piel (y su preciado falo, detalla) para acercarse al forajido más famoso del salvaje Oeste, que resulta ser un hombre humilde y amante de la paz y el orden. En suma, una película de ficción muy alejada de los peligros reales que afrontan cada día los verdaderos periodistas por informar del crimen organizado que desangra México. Penn encarna al prototipo de ‘celebrity’ occidental concienciada. Pero indocumentada. Pululan por Hollywood y Londres, La Condesa y Zona Rosa de la ciudad de México. Actúan en películas, o las dirigen, o escriben novelas o dan clases en la universidad. Están asqueados con el capitalismo que los sostiene y buscan en sus ratos libres inspiración en líderes alternativos, que resultan ser, casualmente, autócratas de viejo cuño. Ya se sabe que Neruda amaba a Stalin y que Pol Pot gozó de popularidad entre ciertos intelectuales franceses”.
Lo sorprendente es que hoy, en un mundo informado, el virus de la veneración acrítica por el déspota siga causando estragos. Antes de visitar a ‘El Chapo’, el propio Penn acudió a rendir pleitesía a Hugo Chávez, siguiendo la estela de otros famosos, como los realizadores Michael Moore y Oliver Stone. Con los ditirambos que les dedicaron se pueden llenar páginas. “Mi amigo el presidente Chávez es una de las fuerzas más importantes que hemos tenido en este planeta (…) Es un líder fascinante (…) Le tengo amor y gratitud”, decía el actor. “Es un héroe”, añadía Stone, mientras repudiaba a los opositores, unos reaccionarios que solo querían desestabilizar. Y Moore alababa su acertada política económica.
El director de Platoon ya había posado a caballo con el subcomandante Marcos en los años noventa, cuando las peregrinaciones de famosos convirtieron la selva Lacandona en un ‘photocall’ de la progresía mundial. No deja de ser curiosa la fascinación de las celebrities concienciadas por los fusiles y el uniforme verde olivo, porque luego todos se declaran pacifistas. Y con qué vehemencia defienden regímenes que nunca admitirían en su país: la represión política, el control económico y el desabastecimiento son pequeños inconvenientes que venezolanos deben sobrellevar con la dignidad del ‘Hombre Nuevo’ a cambio de tener a esos líderes providenciales.
Beyonce, Jennifer Lopez, Sting o Julio Iglesias han cantado en sus cumpleaños a dictadores chechenos, uzbecos, kazajos, turkmenos o libios
Vale: Beyonce, Jennifer Lopez, Mariah Carey, Kayne West, Sting o Julio Iglesias han cantado el cumpleaños feliz a dictadores chechenos, uzbecos, kazajos, turkmenos o libios. Cobraron el cheque y mantuvieron la boca cerrada. Lo de Penn, Stone o Moore es amor del bueno y progresismo mal entendido. Lo peor es que luego se empeñan en dar lecciones.
Ricky Gervais subió al escenario de los Globos de Oro y, después de insultar al respetable, su primer chiste fue: “Voy a soltar este monólogo y luego me voy a esconder. Ni siquiera Sean Penn me va a encontrar”. Sobre las risas de los presentes añadió: “Chivato”. Habían pasado 48 horas desde la noticia de que el mayor narcotraficante del mundo, Joaquín Guzmán ‘El Chapo’, había sido detenido en México. La élite de Hollywood se reunió para tomar algo y darse unos premios como suele hacer por estas fechas, fue la ocasión perfecta para medir el impacto de esta extraña mezcla de estrellas, narcos, seudoperiodismo y vanidad.
Lo que emergió de las opiniones que allí se escucharon es que a Hollywood le divierte bastante este tipo de cosas. El más elocuente y el que dio más explicaciones fue el actor Matt Damon. Estas fueron sus palabras en la sala de prensa, con su Globo de Oro en la mano por ‘Marte’: “No la he leído aún (la entrevista). Lo tengo en el teléfono. Soy suscriptor de Rolling Stone, lo leeré esta noche en el avión. Mire, no es nada nuevo que los actores vayan en busca de encuentros como estos. No quiero señalar a ninguno, pero conozco a muchos intérpretes y cineastas serios que han tenido encuentros como estos toda la vida. Y escritores, claro. Y es parte de lo que hacemos para hacer bien nuestro trabajo. De alguna forma, Sean pensó que tenía un público. Estoy seguro de que buscaba algo creativo y que pensó que tenía un valor”.
Casualmente, el director de ‘Marte’ es Ridley Scott y también se llevó un premio. Cuando compareció en la sala de prensa todo el mundo tenía en mente que el pasado verano anunció su intención de dirigir una cinta que se titularía ‘El cártel’ basada en un libro del mismo nombre sobre la guerra contra las drogas escrito por Don Winslow y en el que sale ‘El Chapo’. La pregunta de si pensaba seguir adelante estaba servida. La respuesta fue esta: “¿El Chapo? ¿Lo dice porque lo detuvieron ayer? Es interesante y relevante, pero el libro engloba más que eso. Es verdaderamente la pieza más importante de todo el asunto así que es fascinante, como ‘El Padrino’ de ese mundo”.
Si alguien está interesado en saber qué opinan los mexicanos de Hollywood sobre este asunto tendrá que esperar. El triunfador de la noche, Alejandro González Iñárritu, no dio ni opción a que le preguntaran. Leonardo DiCaprio, a su lado, dijo a la prensa con una sonrisa impecable que no había leído la entrevista porque no estaba publicada aún e Iñárritu se apuntó a esa fórmula. El actor Gael García Bernal o la actriz Ana de la Reguera rechazaron prudentemente comentar el asunto porque es complicado y no disponen de suficiente información. Este fin de semana, el director de ‘El Renacido’ apoyó a Sean Penn en su iniciativa, aunque reconoció que el resultado había sido “bastante pobre”. Alejandro se sorprendió también por la entrevista impuesta sin preguntas. Está claro que Sean Penn no podía hacer milagros, por ahora.
“El Chapo, enviado a la prisión de la moda por llevar chándal de Adidas con zapatillas de New Balance. Es un animal”
Otros se cebaron en la innegable parte cómica de todo esto, pero siempre sin criticar a Penn. Lena Dunham y Julia Louis-Dreyfus intercambiaron tuits riéndose de la gran labor de los actores contra el crimen. El cómico Billy Eichner dijo: “Cuando has salido con Charlize Theron solo puedes recuperarte con El Chapo”. La de Chris Rock es esta: “El Chapo, enviado a la prisión de la moda por llevar chándal de Adidas con zapatillas de New Balance. Es un animal”. En los Globos de Oro, el guatemalteco Oscar Isaac dijo sobre la entrevista: “Creo que es bastante guay. Creo que es fascinante lo que (Penn) ha conseguido hacer y que haya obtenido detalles increíbles de la historia de este hombre. No parece un buen tipo, pero simplemente como estudio humano es fascinante”.
La capacidad de Hollywood para convertir cualquier cosa en espectáculo es la clave de su éxito como industria. Venden entretenimiento y cualquier material, sea fantasía o hechos reales, está al servicio del show. En Hollywood las cosas se hacen porque quedan bien. Y vista como una pieza de entretenimiento, la entrevista con ‘El Chapo’ mola. Eso es lo que valoran Damon, Scott e Isaac cuando dicen que es “fascinante” y “guay”. Vista como un trabajo periodístico no solo es infumable sino que puede ofender a quien entienda que glorifica al personaje. No es un jefe de Estado como Hugo Chávez o Raúl Castro, personajes a los que también entrevistó Penn y con los que buscaba el efecto, siempre interesante, de arrojar una visión humana sobre hombres que para el gran público de Estados Unidos son enemigos. ‘El Chapo’ es responsable de miles de muertes y el texto dice que es igual de importante que el presidente de México.
Por eso donde Hollywood ve una historia fascinante y humana, el mundo del periodismo ha visto un complicado debate ético. Nadie acusa a Penn de ninguna ilegalidad. Es más un asunto incómodo. Lo resumió muy bien el director del Washington Post, Martin Baron, con un tuit: “Buen momento para recordar lo que les pasa a los periodistas de verdad que cubren a los narcotraficantes mexicanos”, al que añadió un enlace a un reportaje de su periódico sobre periodistas asesinados por el narco en México.
Nicholas Thompson, de The New Yorker, dijo sobre la entrevista: “Cada línea es una locura de una forma u otra”. Alfredo Corchado, reportero en México del Dallas Morning News, describió el encuentro como “un insulto a los periodistas que murieron buscando la verdad”. El escritor humorístico de The New Yorker Andy Borowitz publicó una broma diciendo que el líder de ISIS cancelaba una entrevista con Penn diciendo que no era “prudente”.
“El mayor traficante del mundo” se entusiasma Penn, los abogados de ‘El Chapo’ ya han salido a decir que Sean se lo ha inventado, testificará
Otros destacaban que la entrevista puede ser mala como texto, y cualquier periodista se asombra ante la falta de agresividad con el responsable de tantas muertes. Por otro lado, es la primera vez que ‘El Chapo’ admite en su vida que es un narcotraficante. El mayor del mundo, dice, según Penn. Este dato puede llegar a ser tan importante para el caso que los abogados de ‘El Chapo’ ya han salido a decir que Penn se lo ha inventado y quieren que sea llamado a testificar.
¿Y los interesados? Entre el espectáculo y el periodismo, Sean Penn parece estar más preocupado por lo segundo. Kate del Castillo, que según las autoridades se cartea con ‘El Chapo’ desde hace tres años y era objeto de sus halagos, se pronunció el miércoles por la noche en Twitter: “Gracias por su apoyo. Como era de esperar muchos han decidido manipular la información y fabricar historias falsas para distraernos del verdadero tema. Pronto contaré mi versión”. Tranquilos. Parece que hay show para rato.
Jamás su nombre había aparecido en tantos medios de comunicación en un mismo día. El domingo 10 de enero Kate del Castillo (México DF, 1972) por fin atravesaba las fronteras de América. Su nombre, junto al de Sean Penn, copaban los titulares del mundo. Fue ella quien gestionó la famosa entrevista que el actor de 55 años le realizó a Joaquín Guzmán Loera, ‘El Chapo’, el mayor narcotraficante vivo de esta época.
La actriz que podría ser la imagen de todos los tópicos de México: amante del tequila, los mariachis, los tacos y el Tri (como se conoce a la selección de fútbol), también habla de política. Ha arremetido públicamente contra al gobierno de Enrique Peña Nieto, y cuestionado a la Iglesia como institución, algo poco usual en una sociedad como la mexicana. La intérprete que en 2012 publicó un tuit en el que además de asegurar que no creía en el matrimonio (ha estado casada dos veces), la monogamia, el Vaticano o los políticos, enviaba un mensaje a ‘El Chapo’. Le pedía que traficara con el bien, con el amor. Dos años después del escandaloso tuit los abogados del capo del cártel de Sinaloa se comunicaron con ella y le pidieron que llevara a la pantalla grande la vida de Guzmán Loera. Del Castillo finalmente dejó de ser la cara bonita de las novelas de amor.
Lo de la interpretación lo lleva en la sangre. Hija del también actor Eric del Castillo, uno de los mayores exponentes del cine de oro mexicano, y de Kate Trillo, comenzó sus andanzas en 1980, pero no fue hasta su participación en el melodrama juvenil ‘Muchachitas’ en 1991 que su carrera como actriz empezó a cobrar forma. Su apellido le abrió las puertas de Televisa, pero su preparación y dedicación la consolidaron como intérprete de telenovela. Su suerte, ser siempre la protagonista. Alejandra, en ‘Azul’ (1996); Verónica, en ‘La mentira’ (1998); Ramona, en ‘Ramona’ (2000); o María Elena del Junco, en ‘El derecho de nacer’ (2001), son solo algunos de los personajes a los que Kate dio vida y que entraron noche tras noche a los hogares de miles de latinoamericanos que para ese momento ya la consideraban una actriz consagrada.
“Teresa Mendoza y yo nos parecemos mucho. Las dos somos muy protectoras. No podría vivir en un ambiente como el narco”
Sin embargo, el deseo por abandonar el papel de niña buena en el que la televisión mexicana la tenía encasillada, decidió en 2002 aventurarse a Los Ángeles -en septiembre de 2015 obtuvo la ciudadanía estadounidense-. “Me aburrí de ser la protagonista. Quería hacer cine, tener nuevos papeles”, confesaba la intérprete en una entrevista en 2012 a la periodista Adela Micha. Pero, también quería olvidar su polémico divorcio con el exjugador de fútbol Luis García. La ruptura que estuvo empañada por rumores de violencia de género fue la comidilla de la prensa del corazón. “Necesitaba alejarme de todo. Los medios de comunicación estaban todo el tiempo acechándome. Era una situación muy dura”, dijo en su momento. Así que “con dos maletas en mano”, del Castillo se afincó en California.
‘American Visa’, ‘Weeds’ y ‘Ciudad del Silencio’ (compartió escenas con Antonio Banderas) fueron algunos de los primeros proyectos que llegaron en esta nueva etapa. Tras el fracaso con Luis García, del Castillo mantuvo una larga relación con Demián Bichir, nominado a un Oscar por su personaje en la cinta Una vida mejor. Más tarde, en 2009, se volvió a casar. Esta vez, con el también mexicano Aaron Díaz, 10 años menor que ella. “Jamás he creído que firmar un papel sea un símbolo de amor. Pero a nuestras familias les daba ilusión la boda, por eso me volví a casar”, se excusó del Castillo, quien se divorció tres años después de Díaz.
El punto de inflexión en su carrera llegó en 2011 de la mano de Teresa Mendoza -personaje creado por Arturo Pérez Reverte para la novela ‘La reina del Sur que salió publicada en 2002. “Nos parecemos mucho. Las dos somos muy protectoras”, confesaba. Aunque al contrario de Teresa, ella “no podría vivir en un ambiente como el narco”. El éxito de la telenovela en Estados Unidos y Latinoamérica fue abrumador. Incluso Pérez Reverte le aseguró que nadie habría interpretado el papel como ella. “Tú eres mi Teresa”, le dijo. Hasta entonces la telenovela había sido el único vínculo de Kate con el mundo del narcotráfico. Pero aquel tuit que envió en 2012 tuvo sus frutos.
El ‘honorable’ Joaquín ‘El Chapo’ no quiere otro tequila que no sea ‘Tequila Honor’. “La familia es lo más importante para mí…”
El capo del cártel de buscó a Kate y le pidió que contará en una película su historia. Hoy hay quien asegura que el delincuente no solo confió en ella, también se enamoró. “Eres lo mejor de este mundo. Te cuidaré más que a mis ojos”, le llegó a decir por mensaje cifrado a la actriz, según unas conversaciones reveladas en Milenio. Quizá fue esa pasión la que también logró la tercera captura de Joaquín Guzmán Loera. La Procuraduría General de la República señaló como una pieza clave en esa detención la relación entre el narco y la actriz. Kate la mujer que no se calla nada, ahora guarda silencio. Su cuenta en Twitter -con más de 2 millones de seguidores- únicamente tiene mensajes de agradecimiento a sus fans que, además de admirar su belleza y talento, ahora respaldan su nuevo negocio su propia marca de tequila ‘Honor del Castillo’.
Le falta ser certificada por el Consejo Regulador del Tequila. Se espera que a finales de febrero, los productores de Feliciano Vivanco y Asociados, empresa ubicada en la carretera Arandas Teapatitlán, Jalisco, le entreguen las primeras botellas. El ‘honorable’ Joaquín ‘El Chapo’ no quiere otro tequila que no sea ‘Honor del Castillo’. “La familia es lo más importante para mí…”.
La actriz Kate tendrá que explicar a las autoridades su relación que mantenía con Joaquín. La Procuraduría General de la República (PGR) ha citado a declarar a la actriz en calidad de testigo, por medio de un citatorio que ya le fue enviado. En la comparecencia de del Castillo se respetará el término de presunción de inocencia, aclaró la fiscalía mexicana. El fin de semana la fiscalía inició una averiguación previa donde la línea de investigación se centra en indagar si la actriz mexicana recibió recursos del recién recapturado líder del cártel de Sinaloa, informó la PGR. Las autoridades mexicanas buscan saber si la actriz tuvo una relación de negocios con ‘El Chapo’ para el lanzamiento de su tequila ‘Honor del Castillo’ y si el capo aportó recursos para una película que se filmaría sobre la vida del narcotraficante.
Este lunes se revelaran conversaciones de la protagonista de la serie La Reina del Sur con Andrés Granados, uno de los abogados de ‘El Chapo’, donde la actriz manifestó su gusto porque el narcotraficante participara en el negocio de tequila que encabeza. “Sería divino”, escribió por mensajes de texto a Granados. En las conversaciones, que da a conocer el diario El Universal, se revela que la actriz le envió al abogado algunas imágenes de la promoción del tequila a fin de que se las mostrara a Guzmán Loera.
La protagonista de varias telenovelas mexicanas vive actualmente en Los Ángeles, California, y podría ser requerida para declarar en el consulado de México en aquella ciudad, donde la entrevistarían fiscales mexicanos que la PGR tiene asignados en Estados Unidos. No tendría que volver a México a comparecer. En caso de que la fiscalía encuentre elementos que comprueben que hubo transferencias de recursos por parte de Guzmán Loera a del Castillo o alguna de sus empresas, ella pasaría de testigo a calidad de indiciada. Hasta el momento, del Castillo no ha contado su versión de la relación que mantenía con el narco oriundo de Sinaloa.
Sean Penn, el arrepentido, no teme por su vida; la entrevista a Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán para Rolling Stone fue un fracaso porque no logró el objetivo de reactivar la discusión sobre la guerra contra las drogas. Queremos que los asesinatos en Chicago paren”, se confiesa ante ‘60 Minutes’ de la cadena CBS; lo del socio de Kate del Castillo, Oliver Stone o Michael Moore con líderes alternativos como Hugo Chávez era amor del bueno y progresismo mal entendido; lo peor es que luego se empeñan en dar lecciones de periodismo sobre entrevistas sin preguntas; el escritor humorístico de The New Yorker, Andy Borowitz, publicó una broma diciendo que el líder de ISIS cancelaba una entrevista con Penn diciendo que no era “prudente”; la PGR cita a Kate para preguntarle si el capo es su socio en la empresa de tequila ‘Honor del Castillo’.