El Ejército es una institución de sólido respeto y credibilidad que está presente en Quintana Roo para sumarse a los esfuerzos del gobierno estatal en el combate a la inseguridad. La brigada de la policía militar, tendrá su Base de Operaciones Mixtas (BOM) en Playa del Carmen. Esta base es la mejor demostración de la coordinación entre las instituciones militares y policíacas, pues participan El Ejército, La Marina, Policía federal, secretaría estatal de Seguridad Pública, Fiscalía General del estado y la secretaría de seguridad pública.
En el combate a la delincuencia organizada nadie está cruzado de brazos. Hay una absoluta coordinación operativa, porque es la única forma de fortalecer la seguridad de los quintanarroenses. No hay varitas mágicas. La seguridad es el resultado de políticas públicas de prevención y de acción inmediata.
No ha sido fácil desmontar las inercias y los vicios del pasado, pero se están logrando resultados. La estrategia está funcionando. Los objetivos son de largo plazo. No se trata de golpes espectaculares sino de acciones concertadas para alcanzar metas firmes y consolidadas.
Por ejemplo el Centro de Control, Comando, Comunicación , Cómputo y Calidad C-5 estará ubicado en lo que se llamó Auditorio del Bienestar. Por cierto, su nombre siempre fue una paradoja porque es un monumento al dispendio y a la estulticia. Su destino era convertirse en un elefante blanco. Pero. Ahora tendrá un uso en beneficio de la seguridad de los cancunenses y de toda la región. Allí funcionará el C-5, desde donde se erstarán monitoreando las cámaras de seguridad que se instalarán, a pesar de su alto costo.
Otro detalle es la Ciudad Militar que se construirá en Cancún. Es un ejemplo más de la coordinación entre el Ejército y el gobierno de Carlos Joaquín. El Ejército, una heroica institución de arraigada vocación republicana, tendrá instalaciones a la altura de su delicada misión en beneficio de la patria y de la sociedad.
Para fortalecer la seguridad los recursos son el soporte fundamental. No se trata de hacer promesas al vacío sino de actuar en consecuencia. El Congreso tiene en sus manos el proyecto para elevar de 3 a 4 por ciento el impuesto al hospedaje. Un aumento mínimo no resentirán los millones de turistas que nos visitan, porque en otros países el impuesto es muchísimo mayor. Esto sin tomar en cuenta que el Caribe mexicano tiene mucho mayores atractivos.
Sin egoísmos ni politiquerías, hay que contribuir con allegarle mas recursos a la seguridad pública.