Todos los que somos padres, abuelos o hemos estado a cargo de preparar el lunch para algún niño, nos hemos visto en figurillas en algún momento para que lo que les ponemos en su lonchera, no regrese intacto a casa. Lo que nos preocupa es que coman algo sano, o que ya de menos cambien su lunch con algún compañerito al que le manden dos tortas de frijoles, que son riquísimas y mas populares que las de jamón.
Vamos a ver algunas ideas para ponerles a los pequeños, que sean ricas y nutritivas, pero sobre todo, apetecibles para ellos. Si somos previsores y creativos, lo planearemos cada semana para no complicarnos en la hora menos indicada: La de preparar al niño para la escuela.
De entrada, seamos realistas: A los niños nos encanta, (una clave, es incluirnos para entenderlos) lo que parece alimento chatarra, lo que parece golosina, y no comeremos lo que tiene «pinta» de saludable si no estamos educados a comerlo cotidianamente y con placer. Una vez aclarado el punto, pensemos como niños.
Por regla general, debemos incluir un alimento de cada uno de los gruposimportantes, como son, frutas, verduras, cereales y, a menos que sean vegetarianos, un alimento de origen animal. Si su pequeño (Soy de la escuela antigua, en «el niño», va implícito tanto la niña, como el niño) no puede o no desean que consuma estos últimos porque son veganos o no consumen alimentos de origen animal, conocen las alternativas, y creo que no necesitan consejos sobre el tema, porque saben bastante de lo que pueden y deben ingerir.
Entonces vamos por partes, como fruta y verdura, elijan las que no pierdan textura en tanto no la consuman, porque nada peor para un niño, que abrir su lonchera y ver una «cosa» negruzca, espesa, chorreada y sin color ni forma. Sugiero que nos inclinemos por jícama, zanahoria, pepino, manzana granny smith, gajos de mandarina o naranja, uvas, mango cortado y un poco verde (Recuerden que es para ellos), guayabas muy firmes, bolitas de melón y sandía, piña en trocitos.
La manzana, de preferencia, mándenla cortada, porque si la mandan entera, por más bella que se vea, lo mas seguro es que no la comerán. No así si la cortan y la rocían con un atomizador con jugo de limón del que ya venden en las grandes tiendas. (Ustedes lo colocan en el atomizador) y les mandan de esos saleritos miniatura con chile en polvo con sal y más limón. Esta sugerencia va para las verduras crudas o crudités, y es genial, en verdad. Los saleritos los venden por docena en los mercados como el de Sonora, o compren pequeñas bolsitas plásticas con cierre y mándenlos en ellas.
Un cereal: Aquí no hace falta que les diga que una rebanada de pan, medio bolillo, unas galletas, una barra de cereal, un pan dulce del gusto del niño, (Se vale, están en etapa de crecimiento) son carbohidratos, que junto con los azúcares que contiene la fruta o verdura, y lo que agreguen de dulce, es altamente energético. Así que cuidado con estos alimentos, para que no los manden en exceso.
Proteína: Para los que no consumen carne: nueces, cacahuates, semillas de girasol, cremas como la de cacahuate o de avellanas, son lo mismo energéticas y nutritivas. Y si no hay problema con los derivados de animal, una rebanada de jamón de pavo o de cerdo, una salchicha cortada en rodajitas y con alguna de las ricas salsitas que saben que a sus hijos les encantan o con un poco de mayonesa, (no se asusten, su contenido de proteínas es bueno y mucho mejor que no incluirlas) quesos, como manchego, gouda, panela, etc. que en cubitos les encantarán. Si a sus niños les gustan las palanquetas o pepitorias, ¡Formidable! Son altamente nutritivas y energéticas.
Las salchichas se pueden cortar en formas diversas y divertidas para hacerlas másatractivas a los niños, igual, el jamón puede ofrecerse en conos o rollos rellenos de ensaladilla de verduras con mayonesa, en tiras con limón y salsa, o cubitos de queso.
No olviden un recipiente hermético para el agua, y que esta sea de preferencia simple o natural, aunque a ustedes no les guste, recuerden: no es para ustedes y están creando hábitos, además estamos pensando como niños que fuimos, y acalorados luego de un juego de recreo, queremos agua simple, no carbonatada o endulzada. (O procuren no incluirla, aquí, sí, sean estrictos).
Entonces, veamos algo simple, que no pierda forma si no está bien frío o caliente:
a. Cuadritos de queso gouda o manchego con uvas lavadas, desinfectadas y secas, sin rabitos. Una barrita de cereal o un par de galletas, y su agua.
b. Unas 10 pasitas con chocolate, un recipiente pequeño con jícama y zanahoria ralladas y su porción mini de chile con sal y limón en polvo, un pequeño jugo o agua suficiente.
c. Un recipiente pequeño con mango en trocitos con chile y limón, una rebanada de pan de caja con toque de mayonesa y jamón, al que pueden descortezar y sellar de las orillas para formar un triangulo cerrado como sobre y su agua.
d. Manzana en cubos o gajos, queso panela en cuadritos, y una bolsa pequeña de cacahuates japoneses por ejemplo, su agua y listo.
e. Atún escurrido con mayonesa y una bolsita con unas 5 galletas saladas, un recipiente pequeño con una tuna con sal y limón o sandía, guayaba, durazno, kiwi o piña. Agua y nada más. (La sandía no se sugiere si hace mucho calor).
f. Fruta y verdura rallada con sal y limón, o fruta seca o deshidratada enchilada y una palanqueta de cacahuate y agua natural.
g. Un medio sándwich de crema de cacahuate con mermelada o miel, aunque no a todos les gusta, pero más bien es a los papás a los que a veces no les gustan algunos alimentos y no se los enseñan a comer a sus hijos, una fruta seca como mangos enchilados.
h. Barra de cereal como los de arroz con malvavisco, que tu puedes prepararles en casa. Ya venden bolsas de arroz inflado de marcas libres, por aquello de que el conocido cereal de arroz, lo quitaron para ofrecernos los cuadritos que nos venden tan caros pero tan empalagosos y de nuevo, verduras ralladas con fruta: zanahoria con pepino, zanahoria con jícama, o betabel con jícama y su chilito con sal y limón.
i. Bolsa o recipiente bien sellado de palomitas de maíz, una rebanada de jamón en tiritas con salsita chamoy o la que a sus peques les encante y agua.
j. Pasta de coditos cocidos con atún y mayonesa. Una fruta picada con chile y limón.
En resumen, y para no dar menús que a veces no nos convencen: Palomitas, sandwiches de un solo pan o pequeños emparedados con jamón, salchichas, crema de cacahuate, nutella, algún lácteo si gustan como quesos, leches de sabores, jocoque o yugurt, alimentos en general, sobre todo frutas que aguanten los «zangoloteos» de las loncheras de los estudiantes sin dañarse hasta hacerse irreconocibles, y que sepan ricos fríos o a temperatura ambiente, frutos secos o deshidratados, agua natural.
En Directo al Paladar, les dejo el enlace de una ensaladita de atún y pasta, que igual puede ponerse en la lonchera con sus respectivas galletas y un relleno dulce de plátanos y chocolate en laminas finas, que al menos a mi, me parece fantástico para poner en el lunch.
FUENTE: DIRECTO AL PALADAR