REDACCIÓN POR MACRONEWS:
Los servicios meteorológicos han consolidado sus proyecciones climáticas para el presente año, y las perspectivas para la península de Yucatán son mixtas.
Aunque se anticipa una temporada de lluvias prometedora a partir de junio, se emite una advertencia sobre una potencialmente peligrosa temporada de ciclones en la región del Atlántico-Caribe y Golfo de México.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua), entidad federal encargada, advirtió que tras un 2023 caracterizado por lluvias impredecibles, se pronostica que el año 2024 experimentará una temporada “buena”. No obstante, la observación actual de fenómenos indica que la temporada de huracanes podría ser significativamente más peligrosa que la del año pasado.
El titular del Comité Interinstitucional para la Atención de Fenómenos Meteorológicos Extremos (Ciafeme) de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), Juan Vázquez Montalvo, abordó estos cambios medioambientales con cautela, puesto que los especialistas en climatología están incorporando nuevos datos a programas y simuladores para anticipar variables emergentes.
Subrayó que se observan signos notorios de cambios y modificaciones en variables que antes se consideraban “normales”. Estos incluyen patrones de nortes, frentes fríos, anticiclones, temperatura del mar y vientos. Los registros actuales difieren de los informados en el pasado, indicando una dinámica atmosférica alterada.
Temporada con muchas lluvias
Las predicciones para las distintas temporadas pueden variar debido al notable aumento en la temperatura del agua del mar. Esto afecta las lluvias, la formación de ciclones y las condiciones de cultivo, así como la flora y fauna regionales.
Vázquez Montalvo afirmó que los modelos matemáticos sugieren una temporada de lluvias generosa, beneficiando la recarga del subsuelo y promoviendo cosechas abundantes. Sin embargo, advirtió que este aumento en las precipitaciones podría influir en la vegetación y floración en la región peninsular.
Un factor clave es la disipación del fenómeno de “El Niño”, que se espera transite hacia una fase neutra a mediados de año, facilitando el regreso de “La Niña”.