Los quintanarroenses son los mexicanos que menos invierten en el mercado bursátil: apenas el 1% de la población del Caribe Mexicano ha decidido diversificarse apostándole a estas formas de inversión, optando por los medios tradicionales como crear un negocio físico o en “tandas”.
Por el contrario, el promedio nacional de inversionistas minoristas es del 7%, de acuerdo a los datos más recientes del Banco de México y la consultora Fliker, gracias al “boom” de las plataformas enfocadas en inversionistas retail desde el 2020.
En la encuesta de Fliker se le preguntó a las personas no sólo si utilizan aplicaciones para invertir en la bolsa, sino también por qué no lo hacen.
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La respuesta de las personas de Edomex, Ciudad de México, Nuevo León, Puebla y Guanajuato, que encabezan la lista con un 18% de su población económicamente activa invirtiendo de esta forma, se centra en que hoy es más fácil a cualquier persona utilizar su celular para invertir desde mil hasta 150 mil pesos, añadiendo que toda la información se encuentra al alcance gracias a las redes sociales.
Pero en los casos de Quintana Roo, Chiapas, Michoacán, Oaxaca, con menos de 1% de inversionistas, la respuesta fue no sólo que tienen “miedo” de utilizar estas nuevas opciones, sino que también consideran que no pueden hacerlo, pues viven al día.
En su lugar prefieren usar las tandas, esquemas piramidales que prometen grandes sumas de dinero a través de referidos, construir su propio negocio, principalmente de comida o guardar su dinero en efectivo.
Pero de este grupo, muy pocos tenían conocimiento que hacerlo de esta forma representaba aún más riesgo o reducía el poder adquisitivo de sus ahorros, ante el golpe de la inflación.
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La mayoría de los quintanarroenses continúa pensando que “invertir” es una actividad exclusiva de las personas con mucho dinero y se limita a crear empresas o comprar inmuebles para después rentarlos.